El enroque de Sandoval

El técnico del Fuenlabrada agita su plantilla en busca de soluciones y sobre todo de resultados. En sus primeras horas como entrenador del equipo madrileño, Sandoval quiso motivar a la tropa y lanzó un aviso a los rivales. De momento no ha encontrado la fórmula de puntos pese a los constantes experimentos. De hecho, ante el Real Zaragoza, el entrenador madrileño sorprendió con un blindaje similar al de Natxo González en Lezama. Una defensa de cinco y el enroque defensivo, claves en la nueva pizarra de Sandoval.

El míster del Fuenlabrada empleó en La Romareda una alineación con claro perfil defensivo, no solo por la línea de cinco futbolistas, sino que sentó a futbolistas más habilidosos como Ontiveros o Bouldini. Dos novedades con respecto a los últimos planteamientos de Sergio Pellicer y que también generó sorpresa entre sus aficionados. A ese repóquer defensivo, hay que añadir que Adrián Diéguez, defensa central, estuvo en el campo como pivote defensivo.

El enroque de Sandoval fue bastante notorio. Casi seis elementos en la retaguardia. La maraña resistió casi 60 minutos de partido hasta que Azón y Puche le dieron la vuelta al marcador. El dilema reside en que el Fuenlabrada no tiene margen de error. Su tropiezo en Zaragoza y la suma de puntos de sus principales rivales, obligan a ganar a los del Fernando Torres. El Fuenlabrada es vigésimo primero en la tabla con 26 puntos y la zona de salvación está a nueve.

Ante el Málaga, el enroque de Sandoval puede desaparecer. El madrileño tratará de encontrar un equilibrio y dar la campanada a un Málaga que dejó su portería a cero y que suma tres jornadas consecutivas arañando puntos. La pizarra, elemento clave para ver si el Málaga se blinda o si el Fuenlabrada se libera. Cuestión de necesidades.

José Ramón Sandoval, entrenador del Fuenlabrada |LaLiga