La duda no mata al Málaga (1-3)

¿Quién tiene ahora dudas? Con esta versión del Málaga, es el momento para que Guede pueda alardear. El plan del argentino salió a la perfección en Anduva, no solo por los tres puntos, sino por las grandes noticias que deja el primer triunfo de la temporada. Una victoria que ratifica el potencial que tiene esta plantilla cuando se suelta, resultado que incluso puede quedarse corto. La duda no mató hoy al Málaga en la localidad burgalesa, siguiendo un poco el chascarrillo del preparador blanquiazul.

Regreso a la línea de cuatro, con doble pivote Escassi-Genaro. Una formación a priori poco alentadora para generar fútbol, pero de nuevo este maldito deporte volvió a ser caprichoso con el Málaga, esta vez para bien. Ni siquiera la lesión de Ramalho en el minuto 18 trastocó el plan de Guede. Entró en su lugar Luis Muñoz, quien apenas duró media hora por molestias físicas.

El inicio no podía ser más fulgurante: en tres toques estuvo a punto de ponerse el Málaga por delante en apenas cinco segundo. Gallar, Fran Sol y un mano a mano que no era capaz de resolver Febas frente a Ramón Juan. Jugada de pizarra perfecta. Los blanquiazules mostrarían personalidad en un escenario tan peculiar en Anduva. Esta tarde sí hubo orden, unas premisas de juego al menos reconocibles. Buen trato con la pelota y un equipo que era capaz de finalizar. Hasta trece remates en una primera parte inmaculada, sin conceder a los de Joseba Etxeberría. Salvo un pequeño impasse en el ecuador, con un Mirandés que era capaz de amenazar por los costados, nada que reprochar a los de Guede en la primera mitad.

El poco acierto de los boquerones, quizás el único lunar. Ni Febas, tampoco Gallar y un Rubén Castro hasta ahora irreconocible de cara a gol, eran capaces de abrir la lata; con innumerables situaciones que se iban al limbo en la zona de tres cuartos. Javi Jiménez hacía justicia a las puertas del descanso, culminando su matrícula de honor particular. Robo inesperado en el centro del campo y el hoy carrilero batía a su exequipo. Los de Guede se iban al túnel de los vestuarios con un botín de oro.

Se mantenía el guion en la segunda mitad, y con un Rubén Castro que por fin se quitaba esa losa que empezaba a pesar… con un golazo. Centro lateral de Gallar desde banda izquierda, acariciado por el delantero canario como solo sabe rematar un buen ‘9’. Nada pudo hacer Ramón Juan para evitar su estreno como malaguista. Juanfran ya había amenazado con un derechazo directo al palo, otro de los héroes de la noche.

Los visitantes se ponían el mono de trabajo para que pasase los menos posible en Anduva. Genaro daba al Mirandés con un acción absurda: penalti clarísimo sobre Raúl García, cuando el delantero estaba de espaldas a portería. No perdonaba el ariete y despertaban los burgaleses. Pero apareció Fran Sol para poner nuevamente las cosas en un sitio: contragolpe comandado por Rubén Castro y Gallar. El madrileño fusilaba a Ramón Juan con un gran derechazo. Deberes casi hechos, aún por dirimir el último cuarto de hora.

Debutaba Pablo Hervías con la blanquiazul, en un contexto favorable para él. No hacía falta apresurarse, solo esperar que López Toca señalara el final. Y un Chavarría que también iba a contar con minutos. Tarde redonda para el Málaga CF… y un tortazo a las dudas.