Pellicer y un mensaje que deja la puerta abierta

El entrenador malaguista era una de las personas que menos consuelo tenía en Vitoria. Al entrenador se le pudo ver visiblemente emocionado sobre el césped, cuando finalizó el partido, y posteriormente en los pasillos de Mendizorroza cuando acudía a la sala de prensa. El suyo es un sentimiento de fracaso por no haber podido salvar al Málaga. A pesar de que sus números no son de descenso, con 22 puntos en 17 jornadas, no ha cumplido la misión de la permanencia. Llegó estando a 4 de salir del pozo y va a terminar la temporada en el mejor de los casos a la misma distancia.

Pellicer ya ha dejado varios mensajes encima de la mesa que pueden ser entendidos como una puerta abierta para salir. “Ya habrá tiempo de pensar en el futuro. El club tiene que trabajar todos los planes, para eso está la gente del club, ¿qué le transmito a los jugadores si pienso en lo que pasa después del partido?”, explicaba en la previa. 

“He salido 3 veces de esta casa, puedo derrumbar a cualquiera. Me siento muy responsable por la gente del club”, argumentaba un Pellicer que pedía tiempo y que no se juzgará ninguna decisión sobre el nuevo director deportivo, con la figura de Loren ya elegida a la espera de que haya un acuerdo. 

Al finalizar el choque en Vitoria, Pellicer insistió en ese mensaje. Del futuro hay gente que está encargada. No es momento de hablar, sobre todo de la figura del entrenador, que estamos más expuestos y con más desgaste. Ahora mismo estoy vacío y tengo que reflexionar”, concluyó en Mendizorroza. Pellicer deja una apuesta abierta a la que le queda una semana de desenlace por delante. Ahora es el turno de palabra de Kike Pérez en los despachos y de José María Muñoz en la sala de prensa.