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El lateral izquierdo del Málaga CF ha pasado por el micrófono rojo de Radio MARCA Málaga en el programa de hoy realizado en el Estadio de La Rosaleda. El jugador nos habla de una semana especial. Tras la contundente victoria en la Nueva Condomina, el conjunto de Pellicer afronta la recta final del año con la moral por las nubes.
Semana. “Ha sido una semana bonita para todos, todo fluye. Ahora viene otra semana donde podemos ganar otra vez y darle la alegría a la afición. Tenemos muchas ganas de hacerlo después de esos dos últimos resultados”.
Atco Sanluqueño. “Es una semana súper importante, casi más importante que la del Alcoyano. Es un rival parecido y hay que estar más concentrados que la semana pasada. El equipo está con muchísimas ganas”.
Malos resultados. “El perder te hace activarte un poco más y no debe ser así. Debemos estar activados toda la semana. Los entrenamientos fueron un espectáculo y se vio en el partido. Feliz por el trabajo de los chicos. Estamos bien, la gente está con ganas. Hay buen rollo, aquí en Málaga siempre lo hay. Ya pasó contra el Castellón y llegaron cinco victorias consecutivas. Lo del Alcoyano fue un palo duro. El equipo trabajó bien y no lo esperábamos. Con el gol de Kevin creo que pudimos ganar y no fue así. En el siguiente partido aunque nos pitaron un penalti en el segundo 35 supo reaccionar rápido y ganar de esa forma”.
Mal inicio en Murcia. “En ese momento dije ‘aquí va a haber guerra’. El equipo insistió en lo trabajado con el míster y fuimos fluyendo. Además el balón parado funcionó, que es algo súper importante. Esa mentalidad es la que hay que tener, incluso cuando se marca un gol a favor. Incluso con el cuarto gol quería más goles”.
Víctor García. “Ya lo dije cuando jugué contra el Melilla. No me gusta entrar por lesión, ya está de vuelta Víctor. Es la mentalidad que tengo, esperar el momento y fluir como está pasando. Creo que estoy en mi mejor momento. Si la mente está bien, las piernas están mejor”.
Final de año. “Lo he estado hablando antes con Jokin, tenemos varios partidos donde podemos encadenar bastantes victorias. Si nos vamos del año con cuatro victorias y el partido de Copa pues mucho mejor. Hay que ir partido a partido, ahora vamos a por el Sanluqueño”.
Copa. “No he tenido la suerte de jugar tanto la Copa, el año pasado la jugué. Ayer me habló el preparador físico del Eldense que coincidió conmigo en el Sabadell y le dije que la que les espera aquí con la afición es grande. Me motivó también. Por qué no llegar lo más lejos posible… Esto es fútbol, esto entra uno y sale otro. Las lesiones son así. Me dio mucha pena lo de Haitam porque veía que iba a tener muy buen feeling y me dio mucha pena. Hice muy buenas migas. En ese momento se nos vino el mundo encima a todos”.
Lesiones. “Es una cosa de lesiones complicado. Es la primera vez que veo a tantos compañeros lesionados. Cosa del fútbol. Cuando no le toca a uno, va otro. Salió Murillo y fue espectacular. Marcó un golazo. El balón parado es muy importante. Manolo Sánchez prepara la pizarra como ninguno. Estamos teniendo bastantes pero saldremos adelante”.
¿Manolo Sánchez insiste mucho en el balón parado? “A veces es pesado sí (risas). Es su trabajo, entiendo que cuando no sale y luego sí como salió ante el Murcia es una satisfacción muy grande. Es un privilegio también tener al cuerpo técnico que tenemos”.
Fichaje por el Málaga CF. “Es una historia larga, es la primera vez que lo cuento. Fue un verano largo donde veo que tengo posibilidades de entrar en Segunda. Mi representante me dice las cosas de cara porque es como un hermano o un amigo. Quiero esperar (era final de junio y principio de julio) y la llamada del Málaga aún no estaba. Veo que no va progresando todo. Llama al Málaga y me impacta. Nunca he estado aquí tanto tiempo. Era como la ilusión de mi vida pero veía que me podía costar adaptarme al vivir siempre fuera. Me encanta estar solo, soy muy independiente. Estuve un mes donde las piernas no me funcionaban tanto porque la mente no me iba. Me adapté y cuando Dani Sánchez se adapta, ya va volando. Todo está fluyendo y estoy súper contento. En parte no me lo creía, veía que el Málaga tenía otras opciones pero al llamarme lo veía como una buena oportunidad para hacer historia en el club de mi vida y marcar mi nombre. No me lo pensé. Nos reunimos con Loren y fuimos hacia adelante”.
Pellicer. “Al míster lo conocía de tenerlo en el filial. Hablé con él una vez ya firmado. No hacía falta hablar con él antes porque ya tenía la confianza. Nunca me lo pensé. Mi ambición me llevaba a ir a Segunda pero lo que hay aquí no hay en otros sitios de Segunda. Tiene mentalidad ganadora, te dice lo que representas y te mantiene despierto y vivo con los sentidos puestos toda la semana. Ojalá siga todo así y se pueda conseguir lo que todos queremos. Cuando se enfada te echa la bronca pero te da herramientas y tranquilidad para poder machacar al rival. Una bronca de Pellicer te lo tienes que tomar para mejorar”.
Málaga CF. “Siendo malagueño es un plus, te hace sentir orgulloso. Muchas veces llego a mi casa, aparco y me piden fotos al llegar a casa. Eso es un orgullo. No todo el mundo tiene esa suerte. Somos el espejo de muchos niños que quieren llegar a ser futbolistas”.
Vestuario. “Hacemos muchas bromas y eso une. Hay muy buen rollo y eso se transmite. El recriminar una cosa para que sea mutuo es lo mejor, porque no sienta mal es para mejorar. Todos nos podemos decir cosas desde la ayuda. Es lo mejor. Manu Molina está siendo importante en el buen rollo también. Larru hace muchas bromas. Kevin tiene ese desparpajo. Todos somos niños y esa alegría no se puede ir. Nunca he estado en una plantilla tan joven. La mayoría somos niños. Esa alegría se contagia a todos. Luca (Sangalli) es serio, pero es un fenómeno. Larru dijo que si Luca estaba feliz es el mejor día del mundo. Cómo cuente chiste ese día nos caemos todos al suelo”.
Dudas. “Es normal el nerviosismo, pero es normal. Un pinchazo puede llegar, esto es una carrera de fondo. Esta semana vamos a por los tres puntos contra el Sanluqueño. Partido a partido”.
Presión. “Te tienes que olvidar de la presión. Estos últimos partidos me lo he tomado muy bien. Al final estoy en casa. Hay que saber llevar la presión y olvidarse de ella. Tenemos que ganar todos los partidos y eso es así. Tenemos que conseguir el objetivo sí o sí. Jugar en La Rosaleda con tanta gente es normal sentir nervios y que vengan los rivales y se crezcan. Nos tiene que motivar a nosotros. Son 25.000 personas que van con nosotros”.
Victoria en Murcia. “Lo necesitábamos porque era un campo complicado y un rival difícil a pesar de su situación. Ganar 1-4 con esa contundencia y el juego nos ha subido la moral, pero con los pies en el suelo. Si se hace lo que trabaja y todos sale, es un orgullo también para el míster”.
¿Qué momentos destacas? “Puede ser que me quede con la imagen de Linarejos. La gente me decía que tengo la suerte de jugar en este equipo y vivir la experiencia. Soy un privilegiado. Muchas veces hablo por teléfono con alguien y me dicen que es una pasada. Cuando ven tanta gente en la grada llama la atención y eso hay que valorarlo. Todos los días me voy durmiendo diciendo que soy futbolista del Málaga y salgo a la calle con el pecho arriba de orgullo”.
Día a día. “No me gusta leer tanto porque creo que no es bueno, pero pienso 24 horas en el fútbol. Después de entrenar y comer, voy al gimnasio. Quiero cuidarme para vivir de esto. Solo pienso en el fútbol y poco más”.
Ascenso. “Lo he soñado. Habría invasión de campo. La multa no pasa nada, lo paga Dioni (risas). También he pensado el camino en bus de celebración. Yo también quiero vivir esas cosas. Vivir un ascenso sería increíble. Siempre lo pienso. Mi sueño es que pite el árbitro y haya invasión de campo para celebrar. Podría ser que me tatúe un medio mural con buenos momentos”.
Familia. “Mi padre me ve todas las semanas y está muy orgulloso. Mi madre no viene porque se pone más nerviosa. Es un orgullo para ellos ver a su niño ante 20.000 personas cumpliendo su sueño. Tiene que ser un orgullo para todos, no solo para mí. Los amigos me ven más, conozco mucha gente al haberme ido y vas conociendo más gente. Tengo esa suerte y para mí es un orgullo también”.
Canteranos. “El que más me ha impresionado es Dani Lorenzo, me impresiona mucho. Es un chaval que en Madrid o estaba lesionado o no estaba cómodo. Lo veo como un avión. Con la mente que tiene, si le sale todo, es un espectáculo. Kevin también. Muchísima gente”.
Reconversión. “Jugaba de mediapunta o extremo derecho. Al llegar al Madrid empiezo a no jugar. Mi competencia era Miguel Baeza. Llega un momento donde echan al entrenador y suben a Zidane y van subiendo. Viene Álvaro Benito y me prueba en el lateral. Me puso en un ejercicio y a mí me daba igual la posición, solo quería jugar. Le hablé por whatsapp con toda mi cara dura. Le dije que quería jugar y no me importaría jugar ahí. Me empezó a poner de lateral y hasta día de hoy. Teniendo las cualidades que tengo, si quiero llegar a la élite, la posición que tengo que tener es la de lateral. Me encanta jugar de extremo, sobre todo a pierna cambiada. Pero díselo tú al míster… (risas). Es una buena competencia con Víctor en el lateral”.
Gol. “Pienso mucho en el gol, en todos los partidos. El año pasado marqué tres goles. Cuando se lesionó Victor, pude marcar dos goles. Dormí mal esa noche. Mentalmente no estaba bien. Ese mismo día se me saltaron las lágrimas al por fin tener lo que siempre había deseado”.
Ciudad Deportiva. “Me hizo gracia. Llegué de Murcia a las dos de la mañana a mi casa. Le dije a mi madre que tenía que madrugar para ir a la Ciudad Deportiva y se pensaba que era mentira. Estuve en muchos campos cuando era canterano. He tenido la suerte de estar ahí ese día especial. Estamos deseando ir, aunque aún quedan fases. A mis niños los tendré en el Málaga y los llevaré a la Ciudad Deportiva”.
Kevin. “Me encanta doblarle. Se va para dentro y también nos alternamos. Tener ese tipo de jugadores donde nos podemos fusionar es muy bueno”.
‘Malagueñización’ de la plantilla. “Quiero hacerlo con Jokin. Tenemos mucho feeling. Es una persona muy buena. Le tengo mucho cariño. Le dije de ir este domingo a celebrar la victoria. Me llevo muy bien con él. Galilea es un fenómeno, yo le digo Brozovic. A veces le llamo así a Einar”.
Rutina. “No soy muy de Play-Station. Mi rutina va con el gimnasio y llegar, cenar y dormir. Mi novia vive en Madrid. Ella viene cada dos semanas y está cómoda allí”.
Gesto de Murcia. “El gesto de Murcia es porque el año pasado lo cogí como rutina y me encantaba hacerlo. El gol siempre está en la mente. Si marco me expulsan, seguro que la lío”.
Preguntas de oyentes
Cambio de mentalidad. “Creo que es por la mentalidad de lo que veníamos haciendo al principio. Entrenar como animales haciendo las cosas que hacíamos después. Hay partidos y días donde no salen las cosas. Eso es la vida y la profesión de cada uno. Ante el Alcoyano nos pesa también el tener las primeras ocasiones y encontrarnos con esos dos goles. Ante el Murcia tuvimos mucha tranquilidad y queríamos reventarlos. Queríamos seguir y seguir. Doblé la banda 15 veces. Conocía a Pedro Léon, me llevo bien y lo veía un poco desgastado por el resultado. Si nos pasa a nosotros en contra nos lo tomaríamos con impotencia, cómo debe ser”.
Diferencias con Víctor García. “Somos dos jugadores parecidos, quizás sea un pelín más ofensivo yo. Él también sube, pero es mejor en defensa. Lo que no tiene uno lo tiene el otro. Nos ayudamos mutuamente. Tengo envidia sana de su portento físico. Yo soy una ‘polvorilla’. El otro día se me apagó el GPS en el minuto 47 y tenía la sensación de ser el partido que más corría. El físico que tiene es increíble. Aprendo de mis compañeros”.
Jugar en Primera con el Málaga. “Si he dicho que quiero jugar Champions, en LaLiga también. Claro que me veo, me encantaría. Es complicado, pero los sueños están para eso. Hay que ir paso a paso y tener tranquilidad. Sí que me veo”.
Ascenso. “No he dicho nada de ascender. Sabemos cual es el objetivo y hay que hablar con naturalidad. No tener miedo. He jugado una vez en playoff con el Linares y es muy complicado”.
Lesionados. “Sangalli es un fenómeno, hoy se ha reído. Están bien y va todo encaminado. Pregunto al doctor y va bien la cosa”.