El golpe sobre la mesa de Izan Merino

El canterano del Málaga CF, Izan Merino, tuvo su primera gran aparición de la temporada en la segunda parte del partido que enfrentó a los de Martiricos en Riazor. Aunque ya dejó buenas sensaciones en alrededor de cinco minutos como carrilero derecho en La Rosaleda ante la SD Huesca. Su gran trabajo diario en los entrenamientos hizo que Sergio Pellicer, ante la ausencia de última hora de Luismi Sánchez para Cádiz, apostara por el malagueño para ser de la partida en el Nuevo Mirandilla junto a Manu Molina y Sangalli en la sala de máquinas. El golpe sobre la mesa de Izan Merino.

En un duelo en el que las cosas no estaban marchando bien para los blanquiazules en la primera mitad con un resultado de 2-0 al descanso. El de Nules decidió tomar cartas en el asunto. El sustituido fue un Luca Sangalli que apenas había tenido presencia en el verde. En un rol bastante diferente, el técnico malaguista decidió confiar en la continuidad del canterano en el césped. Al igual que en Riazor, Izan se animó con un disparo a puerta desde la frontal del área que detuvo David Gil. Defensivamente, su partido volvió a ser muy completo. De hecho, dada su polivalencia, terminó el partido en la posición que le ha caracterizado en gran parte de su carrera, como central.

Izan Merino completó su tercer partido de forma íntegra con el primer equipo del Málaga. Los primeros 90 minutos ininterrumpidos de su carrera en LaLiga Hypermotion. El partido en Cádiz tuvo sus dificultades para Izan, que también cometió errores. Pero, por lo general, su participación fue suficiente para que nadie recordase la baja de Luismi Sánchez en el centro del campo. Por tanto, Izan Merino pide paso y da un golpe sobre la mesa.

Foto; Javier Díaz