
La bala perdida del inicio en La Rosaleda
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El Málaga CF ha disputado ya seis jornadas de la temporada 2025/26 y cuatro de ellas han tenido como escenario La Rosaleda. Pese a ello, el equipo de Martiricos no ha sabido aprovechar la ventaja de jugar como local y ha dejado escapar una oportunidad importante para afianzarse en la parte alta de la clasificación. De los 12 puntos en juego ante Eibar, Real Sociedad B, Granada y Cádiz, los blanquiazules apenas han sumado cinco. El registro contrasta con el buen rendimiento mostrado en casa el pasado curso y supone que los de Pellicer ni siquiera alcanzan el 50% de los puntos disputados en uno de los estadios más concurridos y con mejor ambiente de LaLiga Hypermotion. Una sangría de puntos que, al menos, quedó en parte compensada por la inesperada victoria en el campo de la UD Las Palmas. La Rosaleda y un inicio con cuatro partidos en casa para el Málaga que no han sido aprovechados.
Un balance pobre en Martiricos
Los números del Málaga en su estadio hablan por sí solos. En la primera jornada, los blanquiazules firmaron un empate a uno frente al Eibar. En el segundo compromiso en casa, una chilena agónica dio la victoria ante la Real Sociedad B. Después, llegó un empate con sabor a derrota frente al Granada, en un encuentro que los malagueños tenían controlado con 2-0 a favor y que acabó igualado. Y en la última cita, la derrota en el derbi frente al Cádiz acabó por encender las alarmas en Martiricos. El balance: cinco puntos, cuatro goles a favor y cuatro en contra. Estas cifras colocan al Málaga en la duodécima posición de la clasificación de locales, un puesto poco aprovechado si se tiene en cuenta que es el único club de la categoría que ya ha jugado cuatro veces en casa.
El parte médico, en el foco
Tras el mal resultado del fin de semana, el equipo disfrutó este martes de una jornada de descanso, después de arrancar la semana con trabajo el lunes. En el apartado médico, la atención se centra en el estado del tobillo de Adrián Niño, que podría ser la única novedad positiva de cara al próximo compromiso frente al Burgos. En cambio, Pellicer seguirá sin poder contar con Carlos Puga ni con Joaquín MuñoZ. Dos futbolistas que aún tienen por delante un periodo de recuperación estimado en tres semanas más. La Rosaleda y un inicio con cuatro partidos en casa para el Málaga que no han sido aprovechados.
Foto: José Manuel Campos

5 Comentarios
Toni
Pellicer vete ya! Este año nos hundes, al tiempo…
Paco Alma
Con 8 lesionados en el inicio con 8 puntos, que más quieres… Es mister estamos a media tabla, que queréis hacer si no tenemos dinero y con administracion judicial. Seguro que si no estaria este hombre, el nuevo mister dimitia a los 3 minutos o lo cesaban al 3 partidos, pagar más indenizaciones y buscar otros como Guede o Marcelo sin tener ni idea. Con el hay un equipo que puede ganar, empatar o perder con todos. Son iguales todos ahora mismo, menos el Depor y el Racin. Así que tengan un poco de paciencia y todo llegarámos pronto al sitio que todos queremos, muy lejos para estar en Play off. Suerte a todos y abrazo al mister Sergio que lo merece.
JMG
Hay mucho desesperado y visceral, pero yo también. Antes de empezar esto, yo ya lo dije, otro año más de sufrimiento, tan solo había que ver la política del club en cuanto a la composición de la plantilla. Gente joven con potencial (se supone, pero es un peligro) aderezada con solo algunos jugadores con experiencia, pero con problemas físicos, como siempre, en su historial (a las pruebas me remito). Dicho esto, y empezada la liga, el único que nos puede salvar de la quema de bajar, (cuidadin, cuidadin) porque a otra cosa no podemos aspirar dadas las circunstancias de conformación de la plantilla (22 jugadoreses – 3 lesionados eternamente), y la cantidad de lesiones, es el denostado Pellicer, que para esto es el mejor de segunda división, porque sabe estimular a los jóvenes y sacarles el máximo, pero NO PARA SUBIR, o aspirar a otras cosas, para eso no. El trabaja mejor con los jovenes que con los que vienen de vuelta y son desechos de tientas, los primeros son fáciles de incentivar, los otros ya se conocen el cuento, y saben que para ellos todo está hecho. En general, ya saben todos cual es su tope, y por lo tanto es más fácil conformarse.
La dirección, claro que quiere subir, sobre todo el «cherif» José Maria, pero no sabe de esto. Alguien se imagina el triunfo de gestión a nivel nacional que sería subir a primera división con un club intervenido como el Málaga. De relumbron. SI que quieren y les gustaría subir, su futuro en este chollo del fútbol estaría asegurado, pero desgraciadamente no saben más. Se arriesgan a que fallen las hornadas de futbolistas. Las que están saliendo hoy en día, no son las de Casanovas. Este año las cosas se han desmadrado con las lesiones (algo raro ha de haber porque hasta este punto no es normal), y el peligro, a pesar de la validez para este tipo de situaciones, y NO OTRAS, de Pellicer, es mayor incluso que el año pasado. Yo solo pido que al final no tengamos problemas, ya sería bastante.
Jesús
Y todavía después de tres años hay quien se sorprende del escaso bagaje de puntos del paquete de Pellicer, hay Antonio Hidalgo donde estarás………
JMG
Por cierto, nadie lo ha dicho, el Málaga de la media hora final ante el Cádiz, que es un gran equipo, todo hay que decirlo, fue un vendaval, pero falta lo que hace años que no tenemos el GOL La garra y las ganas que puso el equipo son difíciles de ver, y de eso no se habla, sólo de que se perdió. Otra cosa es la falta de acierto y los fallos cerca de la portería. Volcó el campo de una forma asfixiante para el Cádiz (defensivamente demostró ser un señor equipo) de tal forma que Garitano estaba desesperado en la pausa de hidratación, y no paraba de decir que enviaran balones a la espalda de nuestra defensa para cogernos a la contra pues estábamos muy adelantados, pero ni por esas. No nos pillaron ni una sola vez, aunque estábamos volcados. Eso también debería contar, y no sólo la idea de que algunos jugadores son muy malos, y el entrenador también. Señores usemos la cabeza no sólo para embestir.