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@SuarezRMarca | Volvió Isco Alarcón por tercera vez a su casa y tampoco en esta ocasión pudo brillar. Y eso que empezó más que bien, con cinco minutos llenos de clase y calidad. Rompió a Rosales, a Weligton y sólo la mala suerte impidió que su remate acabara en las redes de Kameni. Luego tuvo otra volea que se fue por encima del larguero. Fue prácticamente lo último que se supo de él.
El de Arroyo de la Miel actuó de falso nueve y demostró que no es su sitio. Sí está para jugar cerca del área rival, pero no de espaldas a portería. Intentó caer en alguna ocasión por la izquierda, pero tampoco encontró su sitio. Al final, terminó siendo sustituído ante su falta de aportación al Madrid.
Al menos se llevó la ovación de una afición que lo adora como el hijo pródigo que es. Isco, bien educado como está, respondiendo con aplausos aunque por dentro sabía que en su tercer regreso tampoco fue la vencida.
Isco