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@JuanjeFernandez || Lo que ilusionan son los fichajes, eso está claro, pero en el Málaga son conscientes de que antes de seguir firmando futbolistas hay que ponen en marcha la operación salida. Hay una plantilla que roza los 25 ó 26 futbolistas si contamos a los que no han sido presentados u oficialmente cerrados y que en los próximos días irán haciéndose efectivos. No se trata de una plantilla especialmente larga, pero sí de momento descompensada.
Juande Ramos ya tiene en su mente los primeros descartes. Tigha, Horta o Fabio Espinho tienen prácticamente imposible hacerse hueco en la plantilla final que gestione el manchego. Es la lógica que sale de trazar la plantilla y comprobar que hasta siete u ocho jugadores distintos pueden jugar en banda. La llegada de Keko y Jony cierra las puertas a algunos jugadores que tuvieron la oportunidad de brillar y no supieron aprovecharla. Con Mastour ocurre lo mismo y a todos esos hay que unir las salidas oficiales de Tissone y Boka el próximo 30 de junio. Filipenko se marchará al Maccabi, aunque en Martiricos todavía no han hecho oficial la operación.
Muy pendientes habrá que estar también de tres salidas que pueden cambiar y mucho la manera de afronta la segunda parte del mercado de verano para los blanquiazules. El primer frente está en la portería. Muy complicado parece que Ochoa y Kameni puedan seguir conviviendo juntos en el mismo hábitat, aún no se sabe cuál de los dos abandonará el barco. Ochoa es el extracomunitario y muchas de las papeletas serán para él. La otra salida es la de Camacho. 18 millones de euros separan al maño de salir de La Rosaleda, en el club están expectantes para saber qué ocurrirá con él y quién podría ser su sustituto. Por último queda Rosales cuya salida es también probable. No será al Rubin Kazan de Gracia que ya ha firmado a otro futbolista en su lugar.
Rosales no irá al Rubin Kazan // Jennifer Lozano