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El sufrimiento que se pudo palpar ayer de nuevo en La Rosaleda se trasladaba a la zona mixta del estadio boquerón. Los jugadores abandonaban el estadio con el nudo en el cuello después de tener que sudar tinta para poder ganar al Lugo en casa. Uno de ellos, fue David Lombán. El central hablaba del triunfo ante los gallegos. “Todos los partidos que jugamos son trabajados. Empezar la segunda vuelta con victoria era un objetivo que teníamos. Era muy importante ganar hoy después de la victoria en Zaragoza. Enlazar dos victorias seguidas en esta categoría te hace dar un paso adelante y un margen de error que te beneficia de cara a los partidos que viene. Estamos contentos con la victoria”.
Su regreso al once, por motivos meramente técnicos de Muñiz, fue una de las sorpresas de la noche por Martiricos. “Después de mucho tiempo sin jugar estoy contento. El único partido que jugué titular fue en El Molinón y estoy muy contento de jugar un partido completo en La Rosaleda. Es un placer jugar en este estadio. Encima si juegas y se da la victoria, mucho mejor”, afirmó el defensa.
Llamó la atención que el zaguero fuese el encargado de pegar las faltas directas durante el choque. “Fue una pena la primera falta. Hubiera ayudado para irnos al descanso empatados. No he podido ayudar al equipo con las faltas, pero, por suerte, los compañeros han metido gol y hemos podido remontar”.
El liderato provisional no hará que el equipo se relaje. Un mensaje que el vestuario tiene grabado a fuego. “Verte arriba siempre es positivo. Esto es muy largo y la clasificación ahora no sirve para nada. Hay que marcarse objetivos cercanos y el objetivo más cercano es el próximo partido. Las victorias siempre son positivas porque te mantienen arriba”.