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@JuanjeFernandez || El duelo del lunes ante el Cádiz es decisivo para las aspiraciones de ascenso del equipo de Martiricos. Víctor Sánchez es muy consciente de ello y si ayer machacó a sus hombres repitiendo una y otra vez las opciones de estrategia defensivas y ofensivas, hoy ha dispuesto una jornada de partidos contra un combinado del filial que ha tenido a los jugadores del primer equipo en tensión durante toda la mañana. Tres encuentros de unos veinte minutos cada uno de ellos en los que el resultado fue lo de menos y donde el preparador madrileño hizo de nuevo mucho hincapié en la fase ofensiva.
El primero de los partidos enfrentó a los malaguistas a once del Atlético Malagueño compuesto por Kieszek, único del primer equipo, Álex Robles, Juande, César Llopis, Dani Sánchez, Ramón Enríquez, Quintana, Karamoko, Hugo Vallejo, Rubén y Joel Arimany. Tras esta media hora inicial hubo cambios y se jugó un partido entre futbolistas del primer equipo para acabar de nuevo jugando contra el combinado de jugadores del filial. Los menos habituales han sido los protagonistas del once malaguista siendo Seleznov uno de los más destacados al conseguir el primer gol de los choques.
Los más habituales trabajaron en las galerías internas del Ciudad de Málaga donde se cruzaron con algunos de los lesionados. Erik Morán, Koné, Pacheco, Ricca y Harper estuvieron al margen de la diferente sesión. El encuentro fue presenciado por Caminero y Juan Rodríguez a los que también se unió Ben Barek. Mañana habrá más trabajo para seguir preparando el duelo ante el cuadro de Cervera.