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@Danielnz97 || Al Málaga ya solo le queda la opción de subir mediante los playoffs. Si bien desde hace tiempo es algo que se podía intuir con facilidad, las matemáticas lo confirman ya desde la noche de este lunes tras la victoria del Granada en el Carlos Belmonte (0-1). El conjunto blanquiazul, que es actualmente quinto, aún no tiene la plaza para la liguilla. Cuatro puntos separan al equipo de Martiricos del Deportivo de la Coruña, que a día de hoy se quedaría sin posibilidades de regresar a la élite.
Solo quedan nueve puntos en juego y el plantel que dirige Víctor Sánchez del Amo afronta este último tramo de la fase regular en un gran momento anímico. Además, el calendario no parece el más complicado: con dos partidos en casa frente a rivales (Zaragoza y Elche) que ya lo tienen todo hecho. Un triunfo podría valer para asegurar el que es ya el único objetivo. Para eso tendrían que perder los gallegos, aunque incluso el empate lo dejaría casi todo hecho. Tampoco podría vencer el Oviedo, con uno menos en el casillero que los de Coruña.
Ganar, ganar y ganar. Esto le permitiría jugar la vuelta en casa en ambas eliminatorias. Siempre y cuando el Mallorca falle alguna vez (y en caso de empate habría que mirar los goles porque el golaveraje particular está igualado). Además, si se produce será, evidentemente, por los buenos resultados cosechados. Con todo lo que eso conlleva en lo que a la moral y el estado de ánimo se refiere. Resulta difícil pensar que si el Málaga no hace pleno va a ocupar ese puesto de bronce. El triunfo ante el Albacete a domicilio es una condición casi indispensable para lograrlo. Esa es, sin duda, la prueba más difícil para los costasoleños. Ese partido podría servir como una toma de contacto entre dos equipos que bien podrían verse de nuevo en la promoción.
El Málaga buscará ser tercero // LaLiga