@Pedromartinper | Un inicio de temporada prometedor e ilusionante, tanto que el ascenso parecía coser y cantar. A todo ello acostumbró el Málaga CF en el primer tramo de campaña, pero, e incluso aun perdiendo semanas antes contra Las Palmas, se produjo un punto de inflexión que inundó en un mar de dudas a jugadores y entrenador. Aquel retroceso se produjo el 19 de octubre en el Martínez Valero.
En el templo del Elche se produjo una derrota más que dolorosa, no por el resultado en sí -2 a 0- sino por las sensaciones tan negativas que dejó el equipo, también condicionado por una semana atípica, donde N`Diaye y Munir llegaron justos al partido y notaron el esfuerzo realizado con sus respectivas selecciones. El equipo dejó de dar el miedo de principios de temporada y fue descendiendo puestos en la clasificación hasta el punto de no retorno, cuando la entidad costasoleña tuvo que rescindir de los servicios de Muñiz.
El caso es que desde aquel duelo en el Martínez Valero, el Málaga no ha sido capaz de encadenar tantas victorias consecutivas hasta este último mes de Víctor, donde se cuentan los encuentros por victorias. Ahora, y ya con el playoffs asegurado, el conjunto blanquiazul se volverá a medir a la primera gran piedra en el zapato de la temporada, aunque ya con los deberes casi hechos. La tercera posición pasa por superar obstáculos pasados.
