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@Pedromartinper | Una modificación y reestructuración drástica de cara a la siguiente temporada. Jugadores que, a pesar de tener contrato, tendrán que salir en busca de nuevas oportunidades. Un entrenador que asegure resultados y que conforme un buen binomio con el cuerpo técnico del primer equipo con tal de beneficiar al club. Y todo con un capital mucho más reducido. Todo esto y más ocurrirá con el filial blanquiazul durante este verano, que se espera movidito y con mucho trabajo.
A priori, el buque insignia estará comandado por Rafa Gil. No es la opción deseada en el seno de la entidad, pero el presupuesto que contempla la cantera de cara a la siguiente campaña exime de movimientos a todas las escalas. Es por este mismo motivo por el que se baraja encontrar un entrenador de la casa para dirigir al Atlético Malagueño. El que más papeletas tiene es Bravo, preparador del Juvenil A. El otro nombre que también suena en la habitación blanquiazul es Alberto González, pero, de nuevo, el presupuesto es el mayor inconveniente para que se produzca la contratación.
Y si desde dentro hay que hacer mil y una maniobras para hacer funcionar la locomotora malacitana, el ajuste que debe hacer en plantilla Rafa Gil es de encaje de bolillos. Alrededor de 40 jugadores tienen contrato con el Málaga CF. El actual director deportivo tendrá que buscarle destino a más de un futbolista que no desea jugar en Tercera División dado que sus prestaciones son para mayor categoría, a pesar de que le resten algún año como malaguista. Además, jugadores del Juvenil A que cumplen edad esperan recibir la llamada del filial, y más si es Bravo el próximo entrenador.
Durante la campaña pasada fue sonado el caso de, por ejemplo, Rodri Zalazar, que se quedó sin ficha. Esto le sucederá a más de un hombre con contrato y con un sueldo bastante alto para la Tercera División, por lo que la remodelación de la plantilla será radical. Muchas incógnitas aún por resolver para un nuevo proyecto que ha de ser fiable y sostenible con el reducido presupuesto a causa del no ascenso del primer equipo.