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@JuanjeFernandez || Ya no habrá tiempo para seguir probando cosas. O al menos no para probarlas sin que el resultado ya tenga el valor de tres puntos a favor o que se los lleve tu rival. El verano ha pasado corriendo y algunos todavía viven en el fallo de Munir ante Bergantiños, pero lo cierto es que estamos en otra temporada. Un curso que el Málaga inaugurará el sábado en los Campos de Deporte de El Sardinero, mítico estadio donde los haya para cortar la cinta de esta renombrada Liga SmartBank. No habrá más amistosos, ni más días libres entre semana, tampoco dobles sesiones, vuelve la normalidad, si es que en La Rosaleda se le puede llamar así al día a día.
Víctor ha tenido la oportunidad de probar y buscar un once, con lo que el Málaga tenga inscrito que todavía está por ver, para intentar conseguir los tres primeros puntos del año. Es por eso que el madrileño ha dado un día y medio de descanso a sus jugadores, la última reflexión antes de meter las manos en la masa y ponerse a crear. Parece claro que el técnico será fiel al esquema que la temporada pasada le funcionó en las últimas jornadas. Con la duda de si Okazaki podrá jugar o no, y de esta manera emplear al japonés de segundo punta o hacer del resto un 4-3-3. Un esqueleto donde Adrián y Keidi son fijos y donde por méritos propios Ramón se ha ganado un hueco.
El equipo disfruta de las últimas horas de descanso de la pretemporada y esta tarde se pondrá de nuevo manos a la obra. Semana de trabajo, rueda de prensa previa al partido, viaje a Santander el viernes y la normalidad de las próximas 42 jornadas.