
CUATRO CANTERANOS CONLLEVAN UN RIESGO
Compartir esta publicación
@JuanjeFernandez || Víctor tiene problemas para el sábado. El entrenador madrileño tiene en mente un once, el que puso ante el Cádiz en el último amistoso de la pretemporada. No es por el resultado obtenido por el cuadro blanquiazul, que cayó por un gol a cero. El problema está en la inscripción de jugadores y en el número de fichas del filial que el preparador puede poner en liza sin entrar en riesgos de alineación indebida. El once de Víctor en el Carranza incluyó a Cristo, Keidi Bare, Hugo Vallejo y Ramón Enríquez. Cuatro jugadores que tendrán en principio ficha de filial, algo que pondría en riesgo la integridad del once.
La norma obliga a mantener sobre el césped siete futbolistas profesionales en todo momento. Se suele decir que sólo pueden jugar cuatro del filial, pero esto no es cierto en el caso de que se sufra una expulsión. Al quedarse con diez, debería seguir habiendo siete profesionales y sólo tres jugadores del filial. Un problema muy peliagudo si la expulsión llega por ejemplo con los tres cambios ya hechos. Una norma que no afecta a la convocatoria, en la que no está limitado el número de futbolistas del segundo equipo.
El técnico madrileño tiene solo seis días más para dar una vuelta al once titular que de momento tampoco podrá incluir a Okazaki, no inscrito todavía en LaLiga. Es probable que Juankar pueda entrar en el once por Cristo y de esta manera reducir el riesgo a quedarse con menos jugadores profesionales de lo que la norma dice que tiene que haber.
