
TENSA ESPERA EN LA ROSALEDA
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@SuarezRMarca | No hay en La Rosaleda un clima de tranquilidad desde hace muchos meses. Ya sea por la situación deportiva, porque todos conocían que no ascender implicaba recortes drásticos; ya sea por la institucional, con todo el entorno del club en contra de un Al Thani que ha demostrado una incapacidad manifiesta para gestionar el club; ya sea por la interna, porque ni siquiera los altos cargos, llámense Jofre o Caminero, tienen garantizados sus puestos en cuanto el jeque dé vía libre a sus flamantes asesores.
No es la primera vez que un desembarco de personas desconocidas aparece con un mandato del presidente para acometer una limpieza y una reestructuración. La última, la de González Segura, fue un fracaso como todas las anteriores. Un ridículo de alguien que venía rebotado del Granada y que salió aún más escaldado de un Málaga donde amenazó con demandar a todo aquel que osara hacer menciones negativas de la familia Al Thani creyéndose con poder para ser el nuevo director general ejecutivo. Su gozo en un pozo, el mismo al que tuvo que refugiarse cuando el propio Sheikh anunció públicamente que de poderes nada de nada.
Ahora, aconsejado por el bufete de abogados Pérez-Espinosa así como por un asesor con residencia en Londres, en las oficinas se espera más pronto que tarde la llegada de sus representantes para llevar a cabo un ERE y para despedir a algunos cargos importantes en los que ha perdido -otra vez- su confianza. Nada nuevo en La Rosaleda. Pero sí una sensación de inestabilidad que impide que el día a día se pueda llevar con normalidad.
