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@SuarezRMarca | Ya puede estar ardiendo el clavo que Al Thani no lo soltará aunque se le quemen los dedos. Es la metáfora que explica que el jeque se aferra con más ímpetu que nunca aún al sillón presidencial del Málaga. De ahí que, sabiendo que sus argumentos han sido una y otra vez rechazados por las distintas instancias judiciales, su objetivo haya sido alargar lo máximo posible en el tiempo el denominado caso Bluebay.
Presentación de una demanda vía penal el mismo día en el que comenzaba el juicio civil, retrasos injustificados en sus comparecencias, petición de una aclaración de la sentencia contraria a sus intereses… y la última, la de aprovechar que Bluebay demandó a Al Thani y a sus sociedades para dividir la defensa en tres despachos de abogados diferentes. De este modo, amplía los frentes y enmaraña la situación para intentar complicar la vida a los letrados de la parte contraria, que tienen que verse las caras con tres bufetes distintos.
De ahí que este lunes, Al Thani presentara el primer recurso contra la sentencia en la que Bluebay recupera el 49% de las acciones que en su día el Sheikh le compró a Fernando Sanz, en nombre de Nas Football S.L., a través del despacho Pérez Llorca; este martes ha metido el segundo recurso, representando a Nasir Bin Abdullah & Sons S.L. y a Nas Spain 2000, S.L., a través de Gómez Acebo y Pombo; y también este martes, representando al mismo Abdullah Bin Nasser Al Thani como demandado, mediante el bufete Cárdenas y López, afincado en Marbella.
Una estrategia legal para enmarañar el caso y complicar la vida a los abogados de Bluebay, pues deben ahora estos desmontar uno a uno cada recurso para que el juez no los admita a trámite, en vez de sólo responder a una apelación. Como se ve, Al Thani lucha con uñas y dientes por lo que considera que es suyo, aunque eso le pueda costar la vida al Málaga CF.