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@Danielnz97 || Sergio Pellicer, entrenador del Atlético Malagueño, atendió a Radio Marca Málaga en el programa correspondiente a este viernes 8 de noviembre, realizado desde el stand de Tecnocasa en el Simed (Salón Inmobiliario del Mediterráneo en Málaga), un evento celebrado desde el FYCMA (Palacio de Ferias y Congresos, en la Avenida de José Ortega y Gasset, 201). Entre otras cosas, se alineó con Víctor en lo que a la norma de tener que jugar con un mínimo de siete fichas profesionales se refiere: "Es un veto; nosotros también hemos estado cerca de cometer alineación indebida".
“Todos los técnicos estamos haciendo un buen trabajo. La pasión es innegociable. Tenemos que ser aún más exigentes con los chicos. El elogio debilita. Sí hay buena hornada de canteranos, pero para elogios ya están los padres y los familiares. Es decir, tenemos que hacer un poco de poli malo”, apuntó Sergio Pellicer sobre el nivel de exigencia.
“Para llegar a juvenil no lo has tenido tan difícil, te han allanado el camino. La mayoría han jugado siempre como titular todos los partidos. El fútbol profesional es una selva; hace mucho frío fuera. La competencia es brutal, como en todas las profesiones. Tienen que estar preparados. Nosotros queremos que estén lo más arriba posible, claro, pero va a ser un año complicado en el que vamos a pelear por lo máximo”, indicó también.
Dijo Pellicer tras la derrota frente al Almería B (0-3) que si alguien pensaba que el Malagueño se iba a pasear, que ya podía olvidarse. Acerca de esas declaraciones, señaló: "Yo creo que el pasado es bueno para recordarlo. Me olvido de él, pero lo tengo ahí. Las puertas están más abiertas para los chicos del filial, así que hay que hacer que estén preparados, no es que jueguen, sino que den rendimiento los futbolistas que suben al primer equipo".
Por otro lado, dignificó y aplaudió la trayectoria de Francis Bravo durante la temporada pasada, a pesar de que no se lograran los objetivos: “El año pasado, el juvenil hizo un buen trabajo de formación, aunque no obtuviese una buena clasificación. Hay que mirar a la postre. Antoñín no jugaba el año pasado… y Julio ha explotado ahora”.
Hizo referencia, además, a la igualdad y a la dificultad que hay en Tercera División esta campaña: “Este año, debido a que no subió ninguno a Segunda B y bajaron otros, pues va a ser muy complicado. Hay una pelea brutal, pero no nos debe servir de excusa. Lo que quiero que transmitan es hambre. No podemos transmitirle ego de jugador profesional, sino actitud”.
“Nuestra propuesta es más de mirar la portería rival, pero hay que mejorar en equilibrio. Es decir, momentos sin balón, de transiciones defensivas… Esa capacidad de esfuerzo y de sacrificio es lo que tenemos que mejorar. Va a ser un beneficio individual para que luego sea colectivo”, comentó sobre el estilo de juego.
El filial se enfrenta este fin de semana al colista, el Huétor Vega. Así lo analizó Sergio: “Va último, pero es una posición irreal. Hay equipos, por lo mostrado durante el desarrollo de los partidos, que son mucho mejores de lo que muestra la clasificación. La mayoría de los encuentros los han perdido por la mínima. El 80% son gente sub-23. Intentan jugar bien al fútbol y tienen ilusión y carácter”.
“Donde el Atlético Malagueño va, es día de club. En Motril nos lo dijeron, que el presidente no quería jugar el jueves por el tema de la taquilla. A la mayoría les gustaría estar donde están nuestros jugadores. Somos un reflejo. Y eso es lo que les intentamos transmitir, aunque no es fácil”, apuntó también en cuanto a lo que es capaz de mover el filial blanquiazul.
Por último, si tener una ciudad deportiva, como tuvo Pellicer en el filial del Deportivo, ayudaría mucho o no. Así respondió el entrenador: “Eso lo sabe todo el mundo. Yo tenía dos campos para entrenar y al lado lo hacía el primer equipo. Todos los técnicos de la base se tienen que reciclar y autoexigir más. Hay que darle mucho mérito a quienes lo hacen en campos municipales con la mitad del mismo. Lo ideal sería que pronto apareciese esa oportunidad”.
Pellicer