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Javi Gracia no se olvida del Málaga. Tal y como hacía en Rusia, lo hace ahora también desde Inglaterra, está pendiente de la actualidad del club blanquiazul. Por eso no le pilló de nuevas lo que ocurrió con el que fuera su presidente, Abdullah Bin Nasser Al Thani, y la situación judicial que vive la entidad.
«Es un proceso que viene de lejos, incluso estando allí yo se intuía que podía pasar. No sé a qué nivel, pero con la justicia por medio, con la propiedad en cuestión, todo arrastra a una situación deportiva más difícil y compleja. Mi deseo ha sido siempre lo mejor para un club donde he estado dos años y he sido muy feliz. Lo que más necesita es resolver esa situación de propiedad y poco a poco ir conformando un equipo que aspire a poder volver a Primera», ha expresado el técnico navarro en Radio Marca Málaga.
Para ello, y con la crisis económica muy presente, el Málaga deberá volver a tirar de cantera. Algo que Gracia ya hizo, pero no precisamente por necesidad. «Se habla de las canteras en general y tienen que ser un activo importante en todos los clubes. Pero si hablamos del Málaga, cuando tomaba decisiones en dar confianza a jugadores como Pablo (Fornals), Juanpi, Samu Castillejo y demás, lo hice convencido y no por necesidad. Siempre ha existido la cantera y se puede y se debe apostar por ellos porque ya han demostrado su valía y son y serán un activo«.
Pero no se ha querido colgar, nunca lo ha hecho, el mérito de sus carreras. «Soy quien les dio ese empujón para debutar en Primera. Pero el mérito, primero, es de ellos. Son gente que han mostrado su capacidad de trabajo, su ilusión por ser buenos jugadores, y eso ya se les podía intuir en esos momentos. También es mérito de aquellos que trabajaron antes con ellos. Aposté en un momento que era bueno para ellos y buenísimo para el equipo».
LA SALIDA DE DARDER Y LA SUYA A RUSIA
Uno de los episodios que enrareció la relación de Gracia con Husillos y con el Málaga fue la salida de Sergi Darder, al que casi se le obligó a bajar del avión antes de un viaje a Barcelona. El ex del Watford ha confesado que fue una de las cosas en las que pensó cuando decidió marcharse al Rubin Kazan. «Son situaciones que te van empujando hacia una manera de pensar. Hay que aceptar ciertas cosas, pero tienes que tomar una decisión pensando en lo mejor para ti y se te pasan en la memoria todas las cosas que has vivido. Has de intentar ser lo más ecuánime posible para tomar una decisión acertada. Lo de Darder fue difícil de aceptar«.
En cualquier caso, no guarda rencor a nadie. «Siempre estuve agradecido a Husillos por ficharme tras haber descendido con Osasuna. Luego, en el camino puede haber diferencias».
MÁLAGA, EN SU CORAZÓN
Costó, con su escaso currículum, que la afición confiara en Javi Gracia. Pero a base de trabajo y buenos resultados, lo consiguió y desde entonces la relación es espectacular. «Lo que yo he sentido es una gran muestra de respeto al trabajo, no sólo de cariño sino de algo más. Personalmente, siempre he estado muy feliz en Málaga capital y provincia, también mi familia se ha encontrado muy a gusto De ahí que, aunque Pamplona nos tira mucho, tanto mi familia como yo estemos deseando de ir a Málaga siempre que podemos. Cuando he tenido tres días libres nos hemos ido allí. De la afición, todo lo que te pueda decir es poco, muy agradecido«.
Con ese sentimiento, es lógico pensar que en un futuro podría regresar al club si diesen las condiciones. «Que los caminos se vuelvan a juntar, pues estaría encantado, no te voy a decir que no. Pero no sé si dará, nunca sabes. Lo que sí deseo es lo mejor para el club».
Javi Gracia en el banquillo del Málaga