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El fútbol va regresando poco a poco. Inglaterra ha anunciado que la Premier regresa el 17 de junio y promete un maratón de partidos, en Italia la fecha de la vuelta será el 20 de ese mismo mes. España no ha hecho oficial todavía. Javier Tebas confirmó que LaLiga regresa el próximo 11 de junio con el partido entre el Sevilla y el Betis. Si los contagios siguen a este nivel será el que abra la lata. Pero los ojos del planeta fútbol están puestos en Alemania y en ese experimento llamado Bundesliga. Todo lo que ocurra allí sirve de ejemplo para aquellos países que anhelan volver a rodar sus balones. Es por eso que una alarma ha llamado la atención a todos. De los 22 partidos disputados, solo tres han sido ganados por los equipos locales. ¿Hay peligro de perder el ‘efecto’ Rosaleda?
Llama la atención la facilidad con la que los equipos locales sin su público pierden ese temido factor cancha. Los hechos ya se habían podido experimentar cuando algún equipo ha sido sancionado para jugar a puerta cerrada. Pero estas dos semanas de competición bávara han despejado cualquier duda. Jugar ahora en casa no te da ninguna ventaja. Ya corre el rumor por los pasillos de La Rosaleda. Donde el Málaga se las prometías muy felices echando un vistazo a su calendario. Los de Pellicer tienen seis en Martiricos de los últimos once que se jugarán en esta interminable Liga. Algo que parecía una ventaja en septiembre pero que ahora se ha convertido en un arma de doble filo.
Todos coinciden en señalar que se puede perder el efecto Rosaleda puede estar en peligro. El templo boquerón había recuperado su esplendor con una racha de cinco meses sin perder en casa que se rompió ante el Zaragoza en el último partido antes de la pandemia. Huesca, Extremadura, Girona, Albacete, Deportivo y Alcorcón son los que pondrán a prueba a los malaguistas. Los mismos que habían recuperado el idilio con la grada, que superó los 20.000 espectadores en los dos últimos encuentros.
La Rosaleda se quedó vacía en el tramo final