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El alcalde en funciones y edil de Medio Ambiente, Servicios Operativos y Residuos Sólidos Urbanos, Juan Olea, ha informado este martes de que el Ayuntamiento ha dado los primeros pasos para conseguir que Benalmádena sea referente de sostenibilidad en el uso del agua regenerada con el contrato de un estudio por todo el municipio que permita contemplar añadir el riego y baldeo del municipio, ahora prohibido por la grave situación de sequía. El estudio cuenta con un plazo máximo de realización de 60 días y ha sido adjudicado a la empresa ROMA INGENIEROS CONSULTORES SL, por un precio total de 15.488 euros.
“Estamos ante un problema vital en estas circunstancias que estamos viviendo”, añadió Olea. “Hemos conseguido con los técnicos trazar una hoja de ruta para saber qué pasos debe dar Benalmádena para ser una ciudad pionera en el uso de agua regenerada”, un estudio que permita si se puede llegar también con ella a las comunidades de propietarios, cómo deben adaptarse los vehículos que prestan servicio y el personal municipal.
Olea recordó que “desde hace un año y medio, Acosol venía advirtiendo al gobierno anterior de la necesidad de contar con un plan serio y responsable para la utilización del uso de agua regenerada”. Cabe recordar que en la actualidad, Benalmádena solo puede utilizar este tipo de agua para el riego del lago de Bellavista y el Parque de La Paloma. “Este estudio permitiría ampliar esa concesión para que Benalmádena pueda ir dando pasos firmes en utilizar agua regenerada desde nuestra depuradora, un recurso que no se puede utilizar en estos momentos si no se cuenta con ese estudio y seguimos sin pozos disponibles para obtener agua”.
Respecto a lo aprobado este martes en mesa de contratación, el alcalde en funciones subrayó que se trata de “un contrato externo que va a permitir que Benalmádena tenga un documento importantísimo para que el municipio vaya en la senda que nos están marcando los momentos actuales”. Benalmádena “tiene que estar preparada”, enfatizó el también edil de Medio Ambiente, porque “los ciudadanos saben que tenemos un bando que hemos tenido que aprobar siguiendo las indicaciones de la Junta de Andalucía, un bando con fuertes restricciones por la situación en la que se encuentra el municipio”.
En este sentido, Olea concretó que “estamos colaborando de manera muy activa con Acosol y Emabesa para colocar a nuestra ciudad a la cabeza en el uso del agua regenerada”. El estudio especificará cuánta agua regenerada necesita el municipio, cómo se puede acceder a ella, el procedimiento, y, dependiendo del uso, una serie de medidas a implantar, incluso en los propios vehículos que prestan dicho servicio.
Paralelamente, precisó Olea, “estamos buscando esos pozos que nos permitan reducir el impacto de esas prohibiciones como están haciendo Mijas y Fuengirola, sabemos que es una situación difícil porque no se ha hecho nada en años anteriores, pese a que tenemos documentos que acreditan que durante año y medio Acosol lo había pedido y no se había hecho hasta ahora”.
“Tenemos una fuente de agua regenerada, la propia depuradora, una autorización que nos permite usar esa agua, pero queremos incorporar nuevas zonas que requerirán después de una autorización y concesión para ampliar las zonas de uso de agua regeneradas”, explicó Olea.
Por último, Olea concretó que se ha solicitado a Sanidad “utilizar el agua potable a través de hidrolimpiadoras para los contenedores de basura y alrededores, así como acerados y zonas de vía pública que requieran una tarea clara de desinfección justificada y que las mismas se acepten de manera extraordinaria por cuestiones sanitarias y de higiene pública”.