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El edil Juan Olea recuerda que esta iniciativa forma parte de las acciones encaminadas a embellecer uno de los pulmones verdes más importantes de la provincia, con una escultura de la que ahora se indaga quién puede ser su autor.
En un principio, estuvo en una fuente de Solymar, siendo retirada por sufrir actos vandálicos, permaneciendo desde principios de los años 2000 en almacenes municipales.
El edil de Parques y Jardines, Servicios Operativos y responsable de Agua, Juan Olea, ha visitado esta semana el Parque de la Paloma donde se ha instalado en el estanque de nenúfares una ninfa que llevaba varias décadas almacenada en dependencias municipales. La iniciativa se enmarca dentro de las acciones llevadas a cabo por el gobierno de Juan Antonio Lara para embellecer este emblemático enclave del municipio, pulmón verde de la Costa del Sol y la provincia.
El Ayuntamiento, según ha avanzado el propio concejal a los medios, está realizando indagaciones para conocer la autoría de esta escultura, realizada en mármol. Esta obra de arte se almacenó desde principios de los años 2000 por cuestiones de seguridad, ya que su ubicación anterior, en una fuente de la plaza Solymar, provocaba que sufriera actos vandálicos de manera constante.
Olea ha puesto especial énfasis en que este tipo de obras de arte “no pueden estar almacenadas más tiempo porque forman parte del patrimonio de los benalmadenses, buscándole una solución para su muestra al público para disfrute de vecinos y visitantes, recuperándola en un enclave único donde no sufra esos actos vandálicos, un ámbito acuático, rodeada de nenúfares, como merece una ninfa”, agregó.
Además, desde el Ayuntamiento intentan conocer su autoría y su fecha aproximada de realización. De momento, en una de las esquinas de la escultura, se aprecia una firma muy desgastada, donde se puede leer la palabra ‘Madrid’, intuyéndose que pudiese ser el apellido de su autor”.
De momento, “sabemos que esta ninfa estaba originalmente ubicada en una fuente de la plaza de Solymar con antelación al año 1970, Tras años almacenada, ahora vuelve a lucir para admiración de todos en nuestro Parque de la Paloma”, añadió Olea. En cuanto a su ubicación con nenúfares, cabe recordar que el área de Parques y Jardines apuesta por ampliar el variado patrimonio botánico con el que cuenta el Parque de La Paloma.
Así, a principios de este verano, se optó por instalar diferentes nenúfares en el emblemático enclave, plantas acuáticas que se mantienen enraizadas en el fondo, teniendo las hojas y las flores en superficie, habiéndose plantado hasta dos tipos, 15 resistentes europeos y por otro, 30 tropicales. Junto a estas, también se han plantado otras plantas acuáticas denominadas palustres, las cuales viven en las riberas de los espejos de agua y de los ríos.