Compartir esta publicación
La Junta de Gobierno de la Diputación de Málaga ha dado luz verde en su última reunión, celebrada ayer, al proyecto para la instalación de 1.612 módulos fotovoltaicos en la cubierta del edificio A de su sede, que saldrá a licitación por un importe de 1.172.950,67 euros. Esta actuación se une a otra en el edificio B, en el que se contempla la instalación de otros 356 módulos fotovoltaicos y que se encuentra en la fase final de contratación. Ambos proyectos permitirán ahorrar casi la mitad del consumo eléctrico actual de los dos inmuebles.
El presidente de la Diputación de Málaga, Francisco Salado, ha explicado que estas iniciativas forman parte de la estrategia de la institución de lucha contra el cambio climático en la provincia, a través de Málaga Viva, en este caso centradas en la reducción del consumo eléctrico y de las emisiones de dióxido de carbono (CO2), así como en la mejora de la eficiencia energética.
“Apostamos por el autoconsumo de energía eléctrica en nuestra sede -ha añadido- junto a otras medidas de ahorro energético en nuestras instalaciones para reducir nuestra huella de carbono. Así que con los casi 2.000 módulos que instalaremos en los dos edificios, con una inversión total de 1,4 millones de euros, no solo disminuiremos nuestra factura de la luz, sino que también evitaremos la emisión a la atmósfera de 268 toneladas de CO2 al año”.
Salado ha explicado que la Diputación también ha invertido en hacer más eficiente el alumbrado público en medio centenar de municipios instalando luces LED en 7.000 farolas. Igualmente, está apostando por fomentar el uso de energías limpias en las calefacciones de edificios públicos, sustituyendo al diesel o a la electricidad, con el aprovechamiento de la biomasa de los montes, un plan iniciado en municipios de la Sierra de las Nieves y que se extenderá al Valle del Genal, la Axarquía o la Sierra Norte.
Paneles en el edificio A
Francisco Salado ha concretado que la instalación en la cubierta del edificio A se plantea con los paneles en disposición horizontal sin inclinación. Con ello, no se altera la estética del inmueble gracias a su implantación de manera simétrica e integrada arquitectónicamente en el conjunto.
Será una instalación fotovoltaica con 1.612 paneles cristalinos, de mayor eficiencia y rendimiento, de 445 vatios y con una vida útil superior a 25 años. La potencia instalada será de 717,34 kwp, que se refiere a la potencia que se puede alcanzar en su punto máximo de rendimiento, por ejemplo, durante muchas horas diurnas en días de verano. El plazo de ejecución de las obras será de cuatro meses.
Con esos paneles se generará una energía anual de 1.074 megavatios/hora, con lo que se ahorrará casi la mitad de la energía eléctrica que se consume en el edificio actualmente. Así mismo, se reducirán las emisiones de CO2 en 223,33 toneladas al año (un 43,9% menos), además de lograr un ahorro económico de casi 95.000 euros al año inicialmente.
Por otra parte, el presidente de la Diputación ha comentado que la contratación de la instalación de 356 módulos fotovoltaicos en la cubierta del edificio B, que salió a licitación por 247.847 euros, se encuentra ya en su fase final y se adjudicará en breve. De esta forma, los trabajos podrían comenzar a primeros de diciembre y tendrán un plazo de ejecución de dos meses.