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El presidente de la Diputación de Málaga, Francisco Salado, ha participado en el acto conmemorativo del Día de la Bandera, en el que ha reivindicado el papel protagonista de Málaga dentro de un andalucismo solidario, competitivo y ambicioso. También han intervenido los consejeros de la Junta de Andalucía Carolina España y Arturo Bernal; el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, y la delegada del Gobierno andaluz en Málaga, Patricia Navarro.
Salado ha explicado que los andaluces “hemos recorrido un largo camino hasta situarnos donde hoy nos encontramos, con muchos indicadores que demuestran que nuestra comunidad avanza con paso firme y se codea con las regiones más avanzadas de España”. En este contexto, ha apuntado que el objetivo es seguir avanzando y mejorando, practicando políticas basadas en la estabilidad, el diálogo y la moderación.
Salado ha defendido la igualdad de todos los españoles en cualquier parte del territorio del Estado, tal y como establece la Constitución Española, y ha asegurado que “esto no es negociable, no puede utilizarse como moneda de cambio”. “Vamos a defender la igualdad frente a los intentos de agravio y de discriminación que se están fraguando”, ha advertido, y ha añadido que “exigimos luz y taquígrafos en cualquier tipo de negociación en la que se ponga en juego la financiación de las comunidades autónomas, sus competencias y la igualdad entre los ciudadanos”.
Frente a todas estas amenazas, ha indicado, las instituciones deben ofrecer “transparencia, concordia, respeto, tolerancia, libertad y defensa a ultranza del imperio de la ley y del Estado de Derecho como ejes de nuestro marco de convivencia”.
Salado ha sostenido que la amnistía o el traspaso de competencias a cambio de votos “no sólo ponen en peligro la igualdad, sino que dejan en suspenso de forma indefinida las inversiones que deben llegar a nuestra tierra de manera urgente”, como las relacionadas con la movilidad o la gestión del agua. “Esto es el verdadero andalucismo: reivindicar la igualdad, el progreso, el crecimiento, la riqueza y el bienestar de nuestra gente, de nuestros pueblos”, ha aseverado, ya que “el andalucismo no pertenece a ningún partido político, es de todos los ciudadanos”.
Por último, el presidente ha recordado que “en Málaga se gestó el primer andalucismo de la mano de Blas Infante, se firmó el Pacto de Antequera y ahora lideramos una nueva manera, mucho más moderna, de sentir nuestra tierra y nuestra bandera”.