Como todo establecimiento susceptible de contagio, La Rosaleda, según los parámetros marcados por los organismos sanitarios, ha cumplido una labor de desinfección en todo el estadio. El personal de mantenimiento del club de Martiricos, equipados con mascarillas, guantes, gafas y trajes específicos, ha estado realizando, desde la semana anterior, esta necesaria tarea antes de congregar,…