
CRÓNICA | Balcerowski se lleva la batalla ante el ‘soldado’ Ejim (88-89)
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Victoria muy sufrida, pero de las claves para estar en la próxima Copa ACB de Valencia. El Unicaja venció por un punto (88-89) ante el Hiopos Lleida con un inconmensurable Olek Balcerowski. El pívot polaco sumó 19 puntos, 9 rebotes y 3 asistencias para un 26 de valoración. El ex de Gran Canaria fue quién mejor interpretó lo que fue el duelo de la segunda parte que se convirtió en una batalla de trincheras. Melvin Ejim, en un brutal tercer cuarto, lideró la reacción del conjunto catalán que tuvo la mejor versión colectiva del curso del Unicaja en el segundo cuarto. El internacional por Canadá, que se medía a su exequipo, acabó con 17 puntos como el máximo anotador de su equipo. Otro veterano curtido en mil batallas, John Shurna, recogió el testigo del excajista después de ser descalificado por cinco personales. Perry (12 puntos) y Duarte (10 puntos y muy fino en el tiro libre), también llegaron a los dobles dígitos de anotación. Esta es la crónica del Hiopos Lleida 88-89 Unicaja. Se trata de la victoria 200 de Ibon Navarro como técnico del cuadro de Los Guindos.
Regresaba la ACB para el Unicaja que visitaba el Barris Nord de Lleida. Una pista caliente y un rival que ha sido capaz de batir a equipos como Barça o Baskonia en esta temporada. El equipo malagueño sabía que tenía que hacer un encuentro muy parecido al que logró firmar UCAM Murcia en tierras leridanas justo antes del parón. Un día especial donde había reencuentro con Melvin Ejim, que partió en el quinteto inicial, y para Chase Audige, que se estrenaba en una convocatoria con el Unicaja y que viviría su debut ante Hiopos Lleida. Ibon Navarro no quería excusas y sabía que necesitaba la mejor versión de sus jugadores del minuto 1 al 40. Salió de inicio con un quinteto ‘made in 2024/25’: Perry, Kalinoski, Tyson Pérez, Jonathan Barreiro y Olek Balcerowski.
Batemon, desde el 6,75, anotaba la primera canasta del encuentro para Hiopos Lleida. Intensidad, transición, velocidad y, en los primeros compases, falta de acierto en el ataque cajista. El primero que descubrió cómo hacer daño al equipo de Gerard Encuentra fue Tyler Kalinoski. Siempre un seguro. Protagonizaba 9 de los primeros 11 puntos del Unicaja en el encuentro. El ‘Tyler Sistema’ mantenía al Unicaja en el intercambio de golpes con el conjunto local. A partir de ahí, se abrió el aro desde la larga distancia para el equipo malagueño. Tillie, Sulejmanovic y Djedovic, que tuvo una actuación de precisión de cirujano en la primera mitad, daba varias ventajas mínimas al conjunto de Ibon Navarro. Con uno de ventaja se marchaba el Unicaja al final del primer cuarto. Llegaron antes los triples que el juego.
Todo lo contrario ocurrió en el segundo cuarto. El Unicaja atravesó su mejor momento de juego de la temporada. El balón corría como la seda. Los movimientos eran automáticos. Se encontraba la ventaja por dentro (Balcerowski insistió mucho en las penetraciones que castigó con tiros libres e incluso con acciones de 2+1) y también desde el triple. El acierto exterior siguió la senda marcado por Tille, Sulejmanovic y Djedovic en el tramo final del primer cuarto. Cinco puntos consecutivos de ‘Zlatan’ ponían al Unicaja en el +9 (28-37, a falta de 5:41) para el descanso. Todo eso ya ocurría con el debut de Audige. El ex del Filou Oostende saltó a la pista en los primeros compases del segundo cuarto y se mostró enérgico en todo momento. Su primera acción, que fue en defensa, acabó en falta. En ataque, asumió un triple, pero consideraba en la mayoría de las situaciones que le tenía que dar velocidad al juego. De hecho, fue capaz de dar una muy buena asistencia a Tyson Pérez que colocaba al equipo malagueño con la máxima: +13 (30-43, a falta de 4:23 para marcharse al vestuario). Encuentra se veía obligado a pararlo.
El tiempo muerto no alteró el ‘plan’ de Ibon. Sí, la versión del segundo cuarto rememoraba viejos momentos no tan lejanos donde todo salía de forma mecanizada. Perry, como ‘boquerón’ en el agua, organizaba a su antojo. Repartiendo y culminando. Encontrando a Barreiro y a Balcerowski. El Unicaja lograba estirar aún más la ventaja a su favor y se marchaba al descanso con 14 puntos de ventaja (37-51). El equipo andaluz se estiraba en el marcador desde el triple (8/21) y Hiopos Lleida se estancaba (sólo un triple en los primeros 20 minutos). Con 9 puntos, como máximos anotadores del equipo de Los Guindos, se marchaban al descanso Kalinoski y Balcerowski. Con 8 puntos, precisión total, Djedovic. Trabajo encaminado, pero no finiquitado.
El Unicaja se marchaba con 14 puntos de ventaja al descanso
Se tenía que agarrar a la reacción el Barris Nord. Subía la intensidad Melvin Ejim. En ataque y en defensa. Lograba un triple para abrir el marcador. Estuvo a punto de sacarle dos faltas personales (le habría colocado al polaco con tres personales) en un abrir y cerrar de ojos. Una de esas acciones recayó en Tyson Pérez. Algo que enfadó y mucho al técnico local, Gerard Encuentra, al que le indicaron técnica. Duarte pescaba en río revuelto. Ejim quería remover las aguas. El Hiopos Lleida regresó del vestuario con una energía muy distinta a la de la primera mitad.
Muchas veces para provocar cambios, hay que buscar el caos. La locura. Que pasen cosas. Y en eso, el Barris Nord, sabe manejarse como nadie. Y también sabe hacerlo Melvin Ejim. El internacional por Canadá conoce de las locuras del manicomio del Carpena y también de las leridanas. Empezó a tirar de raza, coraje y mucha calidad. A base de 2+1 y de penetraciones cargadas de fe, Ejim desataba la locura para la afición del Hiopos Lleida. 11 puntos hacía el ‘3’ en el tercer cuarto y provocaba que gran parte de los seguidores cajistas piensen el porqué se tomó la decisión de renovarle en Málaga. Muchas batallas y noches por vivir le quedan a Ejim en Liga Endesa. A falta de menos de tres minutos para llegar al último cuarto, el equipo catalán se ponía a sólo cuatro de distancia (58-62). Perry era el único en el Unicaja que intentaba poner silencio en el manicomio del barrio. Se inventó dos triplazos brutales. El silencio era efímero. El Barris Nord sabía que debía hacer para remontar el partido.
Perry y Balcerowski eran los únicos capaces de parar la irrupción del Barris Nord
Ibon Navarro llegó a solicitar el tiempo muerto. No lograba pararlo. A Hiopos Lleida le empezaba a salir todo. Incluso los imposibles. Millán Jiménez anotaba uno de los triples más surrealistas del curso. El Hiopos Lleida ya amenazaba en el electrónico. Se colocaba a uno. Los tiros libres de Webb III y una canasta de Olek Balcerowski mantenían una ventaja mínima para los malagueños. Del +14 al +3. Parcial de 29-18 para los de Gerard Encuentra en el tercer cuarto. Tocaba ir a la trinchera. Todo abierto para el último cuarto. La seda del segundo cuarto desapareció. Se jugó tras el descanso a lo que quería el cuadro catalán. Ante tal avalancha de intensidad era poco entendible que Tyson Pérez apenas jugase un minuto en el tercer cuarto. El técnico vitoriano tenía que tirar de él al inicio del último asalto.
Empezaba con nervios el último cuarto. Prisas y pérdidas. En ambos lados de la cancha. Más ganas que precisión. Más energía que pensamiento. Muchos errores. El marcador no se movió en los primeros dos minutos del último cuarto. Lo abrió Balcerowski. El polaco entendió que un partido de trincheras, toda dicha es buena. Arregló una penetración forzadísima de Duarte. Shurna, con una gran acción desde la media distancia, y Diagne, con un espectacular mate, volvía a colocar a Hiopos Lleida a sólo un punto (70-71) tras los primeros tres minutos de juego en el último cuarto.
Los partidos de trincheras también se cargan de faltas. Los dos equipos se ponían, rápidamente, en tres faltas de equipo. Un guion de película de vaqueros. Los pistoleros se ponen de acuerdo en cuando atacarse. Tyson Pérez anotaba de tres, pero, a la siguiente jugada, Millán Jiménez replicaba con otro triple. Nadie lograba estirarse en el marcador.
El Unicaja, en suma de detalles, lograba ponerse con siete de ventaja en el ecuador del último cuarto. Duarte anotaba desde la personal y Alberto Díaz mandaba en el 2×2. Habilitaba a Webb III para un mate y le generaba una gran asistencia a Balcerowski que fue objeto de una clara falta. Se indició, en primer lugar, en antideportiva. Los árbitros, tras la petición de Encuentra, la rebajaron a personal. Quién tenía que rebajar la tensión de la afición era el capitán del Unicaja. Alberto Díaz tuvo que calmar a un aficionado que clamaba al cielo por la decisión arbitral inicial que hubo en el contacto sobre Balcerowski. El polaco, líder de la ‘guerrilla’ cajista, anotaba los dos tiros libres. Duarte, en su mejor acción del partido, habilitó al ex del Gran Canaria para un gran alley-opp. Mirada desafiante de Balcerowski ante el infierno del Barris Nord. Los árbitros lo penalizaron con técnica. Pedía tiempo muerto Encuentra con el 75-83 a falta de 3:57 para el final del partido.
Anotaba el tiro libre de la técnica el equipo catalán, pero Alberto Díaz sacó el ‘manual del defensa inteligente’. En un bloqueo forzaba la falta en ataque de Ejim que cometía la quinta personal y se marchaba de la pista tras haber anotado 17 puntos en casi 22 minutos de juego. Le tocaba a Hiopos Lleida buscar a otros referentes. Otro hombre curtido en mil batallas, John Shurna, recogía el testigo. Anotaba dos canastas inverosímiles que ponían a los catalanes a sólo tres puntos (80-83) mientras Balcerowski fallaba desde la línea de personal. Alberto Díaz lograba anotar una canasta importante, pero Agada anotaba un triplazo que volvía a poner a Hiopos Lleida en el -2. De hecho, antes de cometer la quinta falta personal, tuvo un lanzamiento exterior que podría haber puesto con ventaja a los catalanes a falta de un minuto y medio.
Agada tuvo triple para poner por delante a Hiopos Lleida a falta de 1:30 para el final
Era Chris Duarte quién le sacaba la quinta falta a Agada y anotaba dos nuevos tiros libres. Ventaja de cuatro puntos para el Unicaja cuando se entraba en el último minuto de juego. Había tiempo muerto de Encuentra, pero la realización televisiva se fue con Ibon Navarro que en un claro inglés decía a los suyos: “todo el mundo a por el rebote”. No tuvo mucho efecto sus palabras. John Shurna buscó un triple rocambolesco, pero Walden castigaba en el rebote en ataque. Se iba a la línea de personal sólo anotaba un tiro. Tenía ataque el equipo cajista para sentenciarlo, pero Kalinoski recibió un espectacular tapón y Balcerowski no pudo rematar en el rebote. Eso dejaba una bola extra, con posibilidad de prórroga, para Oriol Paulí. Alberto Díaz, que se las sabe todas en finales igualados, tiró de la vieja usanza. Hacer falta y no dar chance de un triple que lo igualara. Le salió bien. Paulí falló el primero y anotó el segundo. 85-87 y faltaban 8 segundos para el final.
La ponía en juego desde campo ofensivo el equipo malagueño. Bola para Perry. El internacional por Montenegro, que no había visitado la línea del tiro libre en todo el encuentro, tenía que anotar los dos para evitar problemas. El primero entró llorando y el segundo acabó dentro con firmeza. Ventaja de 4 puntos que ya dejaban la victoria para el equipo cajista. La última acción del partido de Hiopos Lleida definió a la perfección el plan de Encuentra en toda la segunda parte. Bola a la esquina y triple brutal de Shurna en la cara de Webb III. Victoria muy sufrida por un punto de diferencia. El rey de la trinchera fue Olek Balcerowski. Triunfo por 88-89.
Foto: Olek Balcerowski realiza un mate ante Hiopos Lleida (acb photo / Pol Puertas)
