EL CLÍNICAS PROLONGA SU RACHA EN NAVARRA (68-71)

0
11
Cuarto triunfo consecutivo del equipo malagueño // Guillermo del Castillo

@RadioMarcaMLG || Sin la obligación imperiosa de ganar pero con la moral de seguir la línea ascendente de los últimos partidos. Así se presentó el Clínicas Rincón en el Anaitasuna, un pabellón que sigue luchando junto a su equipo, el Planasa Navarra, por terminar en la quinta plaza la fase regular de la Adecco Oro y afrontar los Play Off de ascenso a Liga Endesa en las mejores condiciones posibles. 

 

El Planasa Navarra sabía desde el primer momento que, con la permanencia ya conseguida, el equipo malagueño era un arma de doble filo a tener muy en cuenta. El no tener presión es lo que hacía peligroso a un Clínicas que aunque comenzó algo titubeante y sin acierto, pronto encontró el camino de las últimas tres victorias para llevarse otra para el zurrón. El Planasa comenzó fuerte los primeros minutos de partido, con buenas acciones ofensivas y haciendo daño con Moncasi bajo tableros. Miki Servera estaba dispuesto a lucirse ante uno de sus ex equipos y manejaba las manijas del equipo navarro con seguridad y firmeza, de ahí que las primeras ventajas beneficiaban siempre a los locales. Aunque le costaba, el equipo de Aurioles no tenía demasiados agobios a la hora de anotar, y de un primer parcial de 10-6 se pasó en apenas tres minutos a un 15-15 que sorprendía al equipo de Lamua. Con transiciones ofensivas rápidas y con Richi Guillén y Mo Soluade tirando del carro, los primeros diez minutos acabaron con ventaja malagueña por 17-20.

 

En el segundo cuarto el Clínicas siguió en línea ascendente, sabiendo que Navarra se jugaba mucho y la presión por sacar el partido adelante era de ellos. De ahí que Alfonso Sánchez y Romaric Belemene tiraran de físico para poner tierra de por medio nada más iniciarse el periodo. Una canasta de Soluade ponía la máxima en el electrónico (19-27), pero Pablo Almazán, otro ex del Clínicas, se resistía a que se les escapara el partido. Con cuatro puntos seguidos del granadino cuando peor lo estaban pasando sus compañeros y con varias acciones defensivas de mérito, el Planasa Navarra consiguió recortar la diferencia de 13 puntos que habían cogido los visitantes (21-34). De este modo, y con más sudor del esperado, Navarra dejó el parcial al descanso en 25-36. 

 

El Clínicas Rincón se mostraba tranquilo en su juego y centrado en defensa, y es que cuando mejor juegan los malagueños es cuando tienen las ideas claras. Paco Aurioles siguió insistiendo en la defensa del equipo y en no bajar el ritmo de juego para seguir creciendo en la pista. Y así lo hicieron los chicos, que aunque jóvenes, comprendiendo el mensaje y la importancia de no caer en la relajación. El tercer cuarto comenzó como terminó el segundo, con el Planasa Navarra intentando llevar el tempo del juego pero con un Clínicas animado en ambas partes de la pista. Del 25-36 del descanso se llegó al 27-44 que rompía el partido a favor de los malagueños, con un desatado Morayo Soluade y un acertado Alfonso Sánchez que marcaban la diferencia junto a Guillén, espectacular en defensa. En ese momento y a falta de cuatro minutos para el término del tercer periodo, se entró en la dinámica de intercambio de canastas, que lógicamente favorecía a los nuestros. Aún así, el acierto comenzó a bajar en ataque y eso le dio vida a Navarra, que se vio de nuevo dentro del partido en el último periodo tras ponerse la cosa muy complicada para ellos (45-57).

 

Los últimos diez minutos se presentaban interesantes. Un parcial de 0-4 ponía el 45-61 y la cosa más que difícil para Navarra, pero no estaban muertos del todo. Es lo que tiene ser un equipo de los grandes, que si le das vida se acaba pagando. Un 10-0 a favor de los locales comandado por Almazán dejaba las cosas más que igualadas y a falta de dos minutos para el final del partido el marcador se iluminaba con un apretado 63-63. Servera aún tuvo tiempo de anotar el 65-63 con un jugadón marca de la casa y se olía la victoria en el Anaitasuna, pero respiró el Clínicas Rincón tras su largo letargo y consiguió quedarse con una última bola y posesión por delante. Ahí apareció Alfonso Sánchez, para con el 68-68 anotar un triple in extremis que daba la victoria al Clínicas con más sufrimiento del deseado, pero que supone la cuarta victoria seguida del equipo en esta segunda mitad de año y la octava de la temporada. Aún pudo igualar el encuentro Moncasi, pero su tiro no entró.