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El Unicaja lpgró forzar el cuarto partido de la serie ante el Real Madrid en las semifinales por el título de la Liga Endesa. El equipo de Ibon Navarro lo tuvo que sufrir hasta el final, pero acabó venciendo por dos puntos de diferencia. Un partido que tuvo intensidad total. Puro playoff. Tensión, luchas, polémica arbitral, equipos a 200 pulsaciones, el Carpena convertido en un pleno hervidero… ingredientes de una eliminatoria que mide a dos equipos que se han medido siete veces en la temporada y donde el reparto de victorias es de 4-3 favorable a los blancos. Una victoria sufrida la del Unicaja. No solo por la igualdad, sino por las consecuencias físicas que deja en el equipo de Ibon Navarro. Así es el ‘parte de guerra‘ del equipo malagueño.
Perry y Sima se fueron con brechas y con sangre. Ambos recibieron dos puñetazos. El más recordado el que recibió el internacional por Montenegro. El ‘55‘ del Unicaja realizaba la transición defensiva para perseguir a un Musa que se marchaba directo al aro para forzar la prórroga. La bandeja del bosnio no entró. Pero al segundo palmeo, el primero no lo pudo convertir Hezonja en canasta, Garuba empata el partido a falta de siete décimas. Se quedó Perry tendido en el suelo. Con una brecha. Musa le había dado un codazo en la penetración. La canasta del Madrid valía porque no se puede rearbitrar, pero sí se señalaba acto de violencia tras la revisión de los árbitros en el monitor.
Fue tal el golpe que recibió Perry que no pudo lanzar los tiros libres que le correspondían de la falta antideportiva. Tuvo que salir Alberto Díaz desde el banquillo. El capitán del Unicaja convirtió los dos lanzamientos desde la línea de personal y le acabaron dando el triunfo a los cajistas. Otro codazo, esta vez de Tavares, recibió Yankuba Sima. Se pedía falta antideportiva del pívot caboverdiano, pero los árbitros consideraron que Tavares no realizó un gesto sobrenatural. Una brecha prácticamente a la altura del ojo provocó que Sima también tuviera que abandonar la pista.
La dolencia que más preocupa es la de Tyson Pérez. Se vivía el segundo cuarto en el Martín Carpena cuando el hispanodominicano dejó un vuelo brutal que acabó en mate y canasta. Superó en el saltó a Garuba con una potencia tremenda. El problema se dio en el aterrizaje. Se le dobló por completo el tobillo izquierdo. Esguince claro. De hecho, fue el propio jugador el que intentó probarse en la pista, pero al mínimo intento de apoyar el pie, tuvo que pedir el cambio. Lo tiene prácticamente imposible para estar el martes en el cuarto punto de la serie.
“La brecha de Perry es bastante grande. Veremos si Sima es capaz de abrir el ojo y yo no creo que Tyson Pérez pueda estar el martes. Es bastante caballo y puede pasar cualquier cosa. Hoy hemos reservado a Ejim porque estaba exhausto. No podía ni moverse. Vamos a ver si está mejor y nos puede ayudar el martes”, aseguraba Ibon Navarro sobre el estado físico de la plantilla justo después de que terminara el tercer choque de semifinales ante el conjunto blanco.
Así es el ‘parte de guerra’ del Unicaja tras el tercer partido de la serie ante el Real Madrid.