@Danielnz97 || El Unicaja cerrará el 2018 en el Martín Carpena este domingo 23 de diciembre (19:30 horas) con la visita del Kirolbet Baskonia. Un clásico de la ACB que llega con los dos equipos empatados a nueve victorias y tres derrotas. Un duelo que podría hacer subir a los de Casimiro hasta la segunda plaza si, además de ganar, pierde el Real Madrid. De esta forma, se mantendría la diferencia de solo un triunfo respecto al Barça Lassa, que no falló ante el colista, el Delteco GBC (71-104).
Será la vuelta al Carpena de Jayson Granger, que jugó dos temporadas, desde 2013 hasta 2015, con la camiseta verde y del que la afición guarda un buen recuerdo, como de los enfrentamientos directos, en general, entre Unicaja y Baskonia en la Costa del Sol, ya que el balance es positivo para los malagueños, que han ganado 25 de los 44 duelos disputados en su casa contra los vitorianos en la competición regular. 19 suman los vascos, aunque tres de ellos conseguidos en las últimas cuatro visitas al sur de la península.
El Unicaja buscará repetir lo que logró el domingo pasado en el día del -no- récord contra el Barça Lassa para erigirse, ya no como un 'matagigantes', sino como uno de los propios gigantes. Tercer partido en siete días en el Carpena, que querrá volver a ver una tercera victoria cajista que, de llegar, no podrá ser por el acierto o el buen hacer de Carlos Suárez, que cumplió 500 partidos en la Liga Endesa contra los blagranas, pero que es baja por una rotura de fibras en el gemelo interno de la pierna derecha. Tampoco estará Shengelia, el otro capitán, el del Baskonia, que se encuentra en Estados Unidos por el nacimiento de su tercer hijo.
Y el que sí que estará para intentar mantener la imbatilidad del Unicaja en su fortín esta temporada es Dani Díez, que, además, cumplirá 200 partidos con la camiseta verde. El alero empieza a ganar confianza en lo que a minutos se refiere y el otro día se llevó algún que otro elogio por parte de Casimiro en la rueda de prensa. Su papel no será sencillo, puesto que tendrá que suplir, ni más ni menos, que a Suárez. Y lo tendrá que hacer también en los primeros encuentros de enero, ya que al capitán no se le espera hasta dentro de varias semanas.