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Dragan Milosavljevic ya es historia en el Unicaja después del acuerdo alcanzado entre ambas partes para rescindir el contrato que les ligaba hasta final de temporada. El alero serbio lleva sin poder jugar 18 meses por lesión y todavía no hay fecha para un posible retorno a las pistas.
Milo, que acababa de renovar semanas antes, sufrió en agosto de 2019 una gravísima rotura del ligamento cruzado anterior de su rodilla en un amistoso de preparación del Mundial. Durante todo ese tiempo, el club de Los Guindos se ha volcado en su recuperación.
Sin embargo, el parón de la actividad por el confinamiento y unas complicaciones en la articulación dañada hicieron que la rehabilitación se fuera alargando sine die.
Se rompe así una vinculación entre Milosavljevic y el Unicaja que se inició en 2017 cuando el alero fichó procedente del Alba Berlín. Su mejor partido con los malagueños fue justo en el primer encuentro del play off de Liga Endesa de la campaña 18/19 ante el Valencia Basket, donde anotó 28 puntos y sumó 29 de valoración.
Desde Unicaja han querido «agradecer a Dragan Milosavljevic su labor, esfuerzo y persistencia durante estos cuatro años con nosotros y desearle toda la suerte y mucha fuerza en la recta final de su recuperación para que pronto podamos volver a verle sobre una cancha de juego».