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@Pedromartinper | Salomón Rondón no deja de sorprender a propios y extraños. Lo hizo con su marcha de la liga inglesa a la china, dejando a una de las competiciones más atractivas por una liga aún por explotar, pero donde el bolsillo es el gran beneficiado. El venezolano, que había terminado su participación en la Copa de América hace varias semanas, fue presentado con su nuevo club, el Dalian Yifang, hace un día, y ya fue convocado para el primer encuentro.
Debut soñado. Ni en sus mejores sueños se imaginaba que la realidad le iba a dar el primer gustazo en su estreno con la camiseta del Dalian. Se enfrentaban el su equipo contra el Taijin Teda, posicionado ambos en mitad de clasificación. Con Salomón viendo el encuentro desde el banquillo, comprobó cómo Carrasco sigue haciendo de las suyas para adelantar al Yifang en el marcador, aunque Wagner y Acheampong se encargarían de remontar pese a otro gol más del ex atlético.
Con 3-2 en el electrónico y con la necesidad imperiosa de remontar, el vinotinto entró al terreno de juego cuando aún restaban 30 minutos para el final y, además, en inferioridad numérica por la expulsión de Qin Sheng. Un reto mayúsculo, pero no imposible para el `9´. El venezolano remató, a falta de seis para el pitido final, un balón al fondo de la red para poner el empate a tres y rescatar un punto a domicilio. No consiguió el Yifang la victoria, pero Rondón demostró en su aterrizaje que tiene el gol en las venas.