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@Danielnz97 || Nada ni nadie podía hacer creer de nuevo en las posibilidades de salvación del Atlético Malagueño. El filial blanquiazul ya puede acogerse a algo. Aunque todavía sea una cuestión de divinidad, parece que el técnico gaditano es un buen clavo al que agarrarse. Del evangelio según San Juan, San Mateo, San Marcos o San Lucas al de Sanlúcar. Porque el ex del Murcia ha enjuagado la imagen de un equipo que parecía estar condenado a la sempiterna Tercera División tras una decada en la misma. Además, aunque todavía muy lejos de la permanencia, ha conseguido sumar cuatro de quince puntos posibles y ha dado la cara ante rivales muy superiores.
Difícilmente había mejor escenario para conseguir la primera victoria que la Ciudad Deportiva del Sevilla FC. Con, aparte de mucha lluvia, sufrimiento y suspense, a pesar de llegar a ir 0-3 a falta de quince minutos para el final. Un gol de Deco abrió el camino del triunfo en el Jesús Navas. Jugada que empezó, con una fantástica conducción, y terminó, a pase de Grassa, el centrocampista malagueño para poner el 0-1 en la primera parte. Marcador que no se hubiese mantenido de no ser por la doble parada de Samu Casado al borde del descanso.
Con más lluvia todavía, comenzaba la segunda mitad. Otra internada de Deco provocaba el penalti que Sergio Chica se encargaría de transformar para hacer el segundo. Y, poco después, Grasa parecía sentenciar a pase de Iván Jaime. Pero nada más lejos de la realidad, porque Manu Sánchez, en el 76', y Curro, en el 86', le dieron picante, emoción y un punto de thriller a la primera victoria del Atlético Malagueño en el grupo IV de la Segunda División B.