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@SuarezRMarca | Ha llovido mucho desde que en la segunda parte de la temporada 04/05, Míchel Sánchez fuese cedido al Málaga. El centrocampista madrileño había pasado casi toda su carrera en el Rayo, pero fue del Murcia desde donde llegó a préstamo en un mercado invernal en el que los blanquiazules también se hicieron con los servicios de Tote y de Fernando Baiano, y todos a las órdenes de Antonio Tapia, que ejerció de revulsivo en un equipo que completó una segunda vuelta de Champions.
Tras dejar el Málaga sin pena ni gloria, regresó al Murcia y posteriormente al Rayo Vallecano, donde colgaría años después las botas este fino interior zurdo. Allí, en Vallecas inició en la 16/17 su carrera como entrenador del juvenil para pocos meses después ser nombrado técnico de la primera plantilla después de la destitución de Rubén Baraja. Consiguió la permanencia en Segunda y logró ascender a Primera la siguiente campaña como campeón de la categoría de plata. En marzo de este 2019 fue destituido hasta que este verano lo fichó el Huesca.
En aquella plantilla del Málaga, que empezó la campaña con Goyo Manzano como entrenador, se encontraban nombres como Duda, actual responsable de la cantera; Juan Rodríguez, adjunto a la dirección deportiva; o Goitia, entrenador del cadete.