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@JuanjeFernandez || Una vez superado el mal trago de la primera derrota con la victoria ante el Rayo Majadahonda el Málaga encamina sus pasos hacia Riazor. Los blanquiazules tienen en tierras gallegas la reválida del examen suspenso en tierras canarias. El cuadro malaguista busca algo más que tres puntos frente a los de Natxo González. Ampliar la distancia de cuatro puntos con respecto a uno de sus perseguidores e intentar aprovechar los partidos que hay entre los equipos de la zona de play-off para conformar una jornada redonda. Si bien es cierto que en el vestuario malacitano no se quiere hablar de ascenso y que Muñiz huye de la palabra en las ruedas de prensa, tampoco evitan echar un ojo a la clasificación.
Las cuentas que hace la afición son claras. Intentar ganar en casa, cosa que el equipo ha hecho hasta ahora ante Alcorcón, Tenerife, Córdoba y Rayo, y salvar los partidos que se jueguen lejos de la Costa del Sol. Si los de Muñiz vencen en Riazor la jornada puede regalar al Málaga una serie de resultados que continue aumentando los puntos que tiene de ventaja con respecto al séptimo puesto, primero que no juega la fase de ascenso a Primera.
Al margen del interesantísimo partido entre el Dépor y el Málaga de la tarde del domingo, la jornada 7 en Segunda ofrece un enfrentamiento directo entre dos de las mejores dinámicas del campeonato. Las Palmas se mide al Alcorcón en el estadio de Gran Canaria en un partido que de acabar en empate daría muchos beneficios al ganador de Riazor. Por si fuese poco, Granada y Albacete juegan fuera esta semana. Los andaluces viajarán a tierras catalanas para medirse al Reus mientras que el Albacete tendrá que ir hasta el Carlos Tartiere. Ni Reus ni Oviedo han conseguido ganar en casa por lo que los partidos en principio parecen decantados para los visitantes y aspirantes al ascenso.