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@SuarezRMarca | Casi sin hacer ruído, incluso con cierta sorpresa, el Málaga reforzó su lateral izquierdo en el mercado invernal con el fichaje de Brezancic, procedente del Huesca. El serbio, uno de los baluartes del ascenso del conjunto oscense la pasada temporada, había perdido su sitio con el ascenso a Primera y por culpa de problemas físicos. Es por ello que buscaba un lugar donde poder recuperar sus mejores sensaciones.
Brezancic firmó por lo que quedaba de temporada y un año más, por lo que no sólo se podía considerar un parche para paliar la mala configuración de la plantilla en verano sino una apuesta decidida en caso de que Ricca se marche la próxima campaña. Pero han pasado casi tres meses desde su llegada y aún no ha debutado con la camiseta blanquiazul, quedándose casi siempre fuera de la convocatoria. La confianza que Muñiz tiene en su capitán ha hecho imposible su estreno.
Algo que podría haber cambiado este sábado ante el Extremadura. El uruguayo está sancionado y se abría una opción para ocupar su lugar en el once. El sustituto natural sería Brezancic, si bien en la primera vuelta el elegido fue Diego González, incluso por delante de un Miguel Torres que se va a quedar en blanco toda la campaña. Pero el jugador balcánico está con problemas físicos, con una lesión de grado I en el sóleo de su pierna derecha, por lo que parece muy complicado que pueda llegar a tiempo para el duelo del fin de semana. El colmo de la mala suerte.
Brezancic