@Pedromartinper | Uno de los cambios más notables de Víctor Sánchez del Amo en el Málaga desde su llegada se ha producido en el central derecho. Ese lugar tenía nombre y apellidos hasta hace bien poco. Luis Hernández, inamovible e intocable desde su recuperación, ha visto como ha sido superado por Lombán. Ahora, ese lugar tiene otro dueño, o eso parecía hasta el partido frente al Oviedo. Las grandes actuaciones de Lombán en los tres partidos que disputó como titular –Alcorcón, Mallorca y Cádiz- le hicieron posicionarse por delante del madrileño.
Pero las tornas han podido cambiar. Luis Hernández, después de que Lombán viese amarilla en el Carranza, aprovechó a la perfección la sanción de su compañero, que disfrutó de la victoria desde las gradas de La Rosaleda. El ex del Sporting completó un magnífico encuentro ante los ovetenses, mostrando seguridad atrás y dotando a la defensa de jerarquía y liderazgo. Ahora, y después del paso firme de Luis hacia la titularidad, Víctor tendrá un problema, bendito problema por cierto.
Con una semana por delante aún para decidir antes de la cita contra el Zaragoza, el entrenador tendrá que elegir entre seguir la línea continuista de sus primeros partidos o brindarle una nueva oportunidad a Luis después de conseguir mantener la portería a cero con inferioridad numérica. Lo que sí está claro es que Pau es un fijo, y es el que lleva el ritmo en la pista de baile. Solo hay un puesto para dos jugadores que se merecen estar y Víctor tiene la llave para resolver el juego del trono de Luis y Lombán.
