@JuanjeFernandez || Todo ocurrió sobre el minuto 80 de partido. El Osasuna acababa de empatar el choque con el gol de Villar y la inercia de saber que les quedan 10 minutos jugando con un hombre más desata la ambición en los hombres de Arrasate que van a por la pelota en busca de sumar los tres puntos, algo que acabaría ocurriendo con el golazo de falta de Roberto Torres y el concierto de silbato de De La Fuente Ramos. Varios jugadores intentan arrebatar la pelota a Ricca, que se huele la tostada entre empujones y gritos.
Ahí acabó el partido de N’Diaye. El senegalés perdió los papeles como nunca antes los había perdido. Resulta extraño porque el ex del Betis es un ídolo en El Sadar después de lo ocurrido hace varias temporadas y su gesto con un niño tras el desplome de una valla. El caso es que el vestuario malaguista apoyó al jugador. El propio Pacheco hablaba del momento en cuestión. “No vi nada pero lo conozco bien, es de las mejores personas, un chico muy tranquilo, algo grave le tuvieron que decir. Evidentemente solo lo sabe él, él no se enfada con nadie y para hacerlo tuvo que pasar algo”, señaló el que coincidiera con el mediocentro en el Betis también.
La expulsión del centrocampista pudo ser clave para que el Málaga perdiese los puntos. Es por eso que una vez ya en el vestuario el senegalés pidió disculpas a sus compañeros por la expulsión. Muñiz, que también estaba presente en el vestuario las aceptó aunque luego dio un consejo ante los medios al jugador. “Algo pasó que nosotros no controlamos. No hay que justificar nada. Es un profesional y un buen chico y cuando hace eso es que algo pasó. Hay que llevar la situaciones con calma porque no ganamos nada y si perder unos jugadores por unas cuantas jornadas”, dijo.
N’Diaye aprenderá de la acción pero mientras se enfrenta a hasta dos partidos de sanción. Habrá que esperar a que pasen los días para saber que fue lo que le dijeron los jugadores pamplonicas siempre y cuando el jugador suelte prenda. Los futbolistas suelen ser reacios a contar fuera del césped lo que haya ocurrido en el terreno de juego.