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@JuanjeFernandez || Los días de agosto continúan pasando de forma inevitable. El debut liguero de los malaguistas se acerca y el cierre del mercado de fichajes todavía queda lejos aunque el margen de trabajo para realizar las incorporaciones necesarias se va acabando. El límite salarial ha dado algo de respiro a los blanquiazules, gracias a la llegada de MarathonBet los malaguistas se mueven con algo más de soltura por el mercado. El club no puede gastar mucho y por eso retrasa cada nuevo paso en el mercado de verano. Las peticiones del técnico manchego llevan semanas marcadas, pero tanto el técnico como el director deportivo tienen alguna duda con el rumbo que debe tomar la nave malaguistas en estas semanas que quedan por delante.
La idea de Juande Ramos es jugar con el 1-4-2-3-1. El entrenador malaguista ha cedido a la idea que tenía antes de arrancar los amistosos de pretemporada. Al no jugar con dos puntas se ha creado la duda de saber si cuatro delanteros serán demasiados para un puesto en el que en principio solo jugará uno. Con Nesyri como pichichi de la pretemporada, el equipo de Martiricos se plantea mantener al marroquí en el filial y utilizarlo con el primer equipo cuando sea necesario.
Con la portería el tema es distinto. Juande Ramos ha insistido a Arnau en la necesidad de fichar a otro guardameta tras la salida de ‘Memo’ Ochoa. El mexicano ha dejado un hueco que el manchego cree que ni Aarón, ni Samu Casado pueden ocupar todavía. La idea de los malaguistas es esperar a encontrar la ganga adecuada. El perfil que quiere Juande es uno “que lo pare todo”, aunque bromas aparte la idea del club es traer a un portero cuyo coste sea prácticamente ninguno y su experiencia en Primera sea suficiente como para cubrir una eventual baja de Carlos Kameni.
El club aún tiene movimientos por hacer // Jennifer Lozano