Compartir esta publicación
@JuanjeFernandez || El banquillo del Málaga comienza a parecerse a una guillotina. En algo más de dos temporadas y media han pasado por La Rosaleda seis entrenadores diferentes si contamos ya a Víctor Sánchez del Amo que hoy será presentado ante los medios después de dirigir ayer su primera sesión como preparador malaguista. El madrileño es el sexto de una lista que inauguraba Juande Ramos en la campaña 2016-2017. Desde entonces ninguno de los entrenadores malaguistas han conseguido terminar la temporada que empezaron. El manchego, ‘Gato’ Romero, Míchel, José González y Muñiz no lograron su objetivo final.
Comenzó Juande la lista negra. Sustituir a Javi Gracia no era fácil. El navarro había dejado a las puertas de Europa al equipo en dos ocasiones seguidas. El manchego se echó rápidamente una losa a la espalda al hablar de Europa League abiertamente en su presentación. Los resultado no fueron malos y aunque el Málaga vivía cada partido en el alambre consiguió sacar 21 puntos en 16 jornadas, una media más que sobrada para la permanencia pero no para Europa. Una semana negra acabó con su periplo en La Rosaleda. Cambiar a Kameni por Boyko, una goleada del Sevilla en el Sánchez Pizjuán y la eliminación copera a manos del Córdoba fueron los detonantes de su dimisión. Juande no llegó a conectar con el vestuario en ningún momento.
Su sustituto fue petición expresa de la plantilla. Marcelo Romero dirigió al equipo diez partidos en los que solo consiguió una victoria. La lesión de Sandro Ramírez y la inexperiencia del uruguayo fueron los principales problemas de un equipo que pasó de estar a nueve puntos del descenso a situarse a un solo un puesto por encima de la zona roja. Tras perder en San Mamés fue destituido y sustituido en el cargo por Míchel.
El madrileño tardó tres partidos en reaccionar pero acabó sacando adelante la nave blanquiazul. Firmó seis victorias en doce partidos y salvó la situación. El curso siguiente fue otra historia. El Málaga firmó la peor primera vuelta de su historia. Con una plantilla peor que la de la campaña anterior y una falta de feeling total con la grada y la propiedad. Hubo cruce de palabras en sala de prensa y twitter con el presidente para que tras 19 jornadas fuese despedido.
José González fue el elegido por Husillos para la segunda vuelta. Los números del gaditano fueron todavía peores que los de Míchel y el Málaga dejó de soñar con la permanencia prácticamente en el mes de febrero. Nunca una sustitución en los banquillos trajo peores consecuencias para los costasoleños. Con el ex preparador del Granada todavía en La Rosaleda se buscó a Muñiz para intentar el ascenso a Primera, pero ya se sabe como acabó la historia del asturiano.
Los seis últimos entrenadores del Málaga