LESCHUK, EL ACORAZADO BLANQUIAZUL

0
21
Leschuk conduce la pelota en ataque

@JuanjeFernandez || Pocas veces un delantero que se encuentra a dos días de estar tres meses sin marcar gozaría del status que Blanco Leschuk tiene en el Málaga. No solo entre sus compañeros y cuerpo técnico, también el aficionado blanquiazul ha hecho un hueco en su corazón para el argentino. Tres meses con la pólvora mojada que no han mermado su moral y su rendimiento. El partido del ariete en Tenerife fue de nuevo una demostración de verdadero pundonor, garra y sacrificio. Solo tuvo una ocasión clara de gol pero su cabezazo se marchó arriba de la portería tinerfeña en los primeros compases del partido.

 

Fue un día más en la oficina para el punta blanquiazul pero no debería haberlo sido. El delantero puso el bien del equipo por encima de su salud y se plantó en la isla lesionado para jugar el encuentro. Ni Muñiz ni el cuerpo médico fueron capaces de aplacarle después de que el propio club de Martiricos hiciese oficial el lunes que el argentino tenía una luxación en su clavícula. Una lesión que por muy pequeña que fuera, le sacaba en principio de todas las quinielas para disputar el partido ante los de Oltra. Leschuk jugó y cumplió pese a que se llevó algún que otro golpe en la zona lesionada. 

 

El ‘Tiburón’ sigue acumulando medallas al honor. Ya solo falta que vea rota su sequía de cara a puerta. Un gol que se resiste y que le tiene estancado en los seis tantos desde el duelo ante el Numancia en octubre. A pesar de ello, el atacante sigue siendo el pichichi malaguista y el jugador que más ha intervenido en los goles malacitanos ya que también ha dado cuatro asistencias en lo que va de curso. Un seguro de vida del que Muñiz no quiso prescindir en la isla.