Compartir esta publicación
@SuarezRMarca | La frustración y la impotencia que ha venido sintiendo todo el malaguismo en las últimas tres jornadas de Liga, y que tuvo su máxima expresión ante el Valencia, ha vuelto a demostrar una cosa: sin fuerza en los despachos, no hay nada que hacer para que los árbitros no te tomen por el pito del sereno en cuanto haya un atisbo de duda y enfrente esté un grande o un histórico. Bien lo pagará Javi Gracia con esos dos partidos de sanción.
Por eso, porque se vio en la segunda parte ante los che que no se pueden malgastar energías luchando contra los elementos, es por lo que en Riazor el Málaga tiene que volver a respirar fútbol por todos sus poros, centrarse en un sistema defensivo que permite pocas alegrías al rival y aprovechar las ocasiones que se presentarán a la contra. Necesitan los blanquiazules una victoria porque los de abajo ya han empezado a empujar y a recortar distancias.
En peor situación se encuentra un Deportivo que fue la revelación de la primera vuelta, pero al que se le han fundido los plomos. En Bilbao tocó fondo, como lo hizo en La Rosaleda a principios de temporada. Tienen los de Víctor un equipo con mucha calidad ofensiva, pero han perdido tanta chispa que no ganan desde diciembre. Ya ha llovido demasiado y de mirar a Europa ahora andan preocupados porque, con los mismos 32 puntos que el Málaga, la zona peligrosa está a 6 puntos.
La tranquilidad para Dépor y Málaga pasa por un triunfo en Riazor esta noche. El que lo consiga respirará, el que pierda sudará nervios y ansiedades.
Sigue la retransmisión íntegra del partido desde esta web y en nuestras apps para móviles desde las 21.30 horas con la previa y a partir de las 22.05 con el encuentro en directo.
Deportivo y Málaga se enfrentan en Riazor con necesidad de victorias