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@JuanjeFernandez || Juande Ramos ha diseñado una semana de entrenamientos en la que predominará el descanso. El técnico manchego aprovechará el parón por selecciones para ajustar algunas cosas, pero también para dar un respiro a sus jugadores. El entrenador malaguista considera que el equipo se encuentra físicamente bien, pero cree que la presión por conseguir resultados positivos ha mellado algo la cabeza de sus jugadores. Las expectativas levantadas en verano han hecho que el inicio de los malaguistas no haya sido tan tranquilo como se imaginaba, es por eso que el entrenador malaguista cree que el mal juego del equipo en algunos partidos se ha centrado en los nervios y las prisas.
Tras el parón, el Málaga visitará al Alavés el domingo 16 de octubre en Mendizorroza y posteriormente recibirá en La Rosaleda al Leganés el domingo 23 de octubre. Se trata de dos recién ascendidos que han complicado la vida a todos sus rivales hasta ahora. El Leganés fue capaz de empatar ante el Atlético de Madrid y de ganar a Granada o Celta mientras que los vascos han protagonizado la sorpresa de la Liga hasta ahora tras ganar en el Camp Nou por un gol a dos al Barcelona. Un partido que fue un ejemplo de trabajo defensivo y coordinación táctica.
Desde Martiricos creen que con la inercia de la victoria ante el Athletic los partidos ante vascos y pepineros pueden ser la pista de despegue perfecta para los blanquiazules. Salvo el empate ante Osasuna, en el club creen que los demás resultados son perfectamente entendibles por lo que existe una gran tranquilidad con la marcha clasificatoria del equipo. No tanto con el juego, por lo que se espera que sea esa parcela la que mejore cuando el balón vuelva a rodar el próximo fin de semana.
El club confiado en la situación del equipo // Jennifer Lozano