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@SuarezRMarca | Indefinición absoluta. Esa es la calificación del momento en el que vive el Málaga, incapaz de ejecutar un plan deportivo y económico que le devuelva a la normalidad. Enfrascado en mil y una batallas judiciales, pendiente del ultimátum de La Liga, sin poder acudir al mercado de fichajes y sin ni siquiera confirmar si Sergio Pellicer continuará en el banquillo hasta final de temporada o si se sentará este domingo ante el Mirandés.
Tras la destitución de Víctor Sánchez del Amo, el técnico del filial fue el elegido “de manera temporal” a la espera un sustituto definitivo. Sin embargo, los 4 puntos sumados en los dos últimos partidos, en los que además se ha mantenido la portería a cero, y la confianza del vestuario, suman a su favor. En su contra, que Al Thani quiere un nombre mediático, más allá de que encaje con los jugadores o con un estilo determinado de juego. De momento, este martes ha regresado el equipo al trabajo bajo las órdenes de un ‘Pelli’ que ya no tiene a Koke Contreras como preparador de porteros.
El ex meta internacional se despidió el sábado de sus pupilos y en una carta a los aficionados ha desvelado que se marcha “por lealtad a Víctor. Con los años he aprendido a ser leal con quien da la cara por uno y eso ha provocado sentir que mi sitio en estos momentos no sea seguir trabajando en el Málaga CF como si nada hubiera ocurrido", ha argumentado como motivo para "rescindir de manera amistosa” su contrato.
Pellicer da instrucciones desde el banquillo