
IVÁN, DE TERRIBLE A TEMIBLE
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@Pedromartinper | Levantó pasiones e ilusiones a su llegada y se marchó dejando a su paso una decepción incuantificable. Es Alejo y su estancia en Málaga, la cual no fue como él mismo esperaba. El jugador llegó a la Costa del Sol en el mercado invernal de la pasada temporada en calidad de cedido procedente del Getafe. Parecía, por su calidad y experiencia en la máxima categoría, un fichaje `Top´ para Segunda División, y no tardó en demostrarlo.
En su debut oficial con la elástica blanquiazul, Iván Alejo, a pesar del empate a cero contra Las Palmas, fue el mejor del partido, desdoblando por banda, dando profundidad al equipo y encarando a su marca. Y lo que parecía la primera de tantas exhibiciones, resultó ser el mayor espejismo de su carrera deportiva. A raíz de su respectivo estreno, Alejo se convirtió en un jugador intrascendente, que fue perdiendo valor en el equipo y, en consiguiente, su puesto sobre el terreno de juego.
Tal fue la debacle que el propio jugador, después de la despedida en el último encuentro ante el Deportivo, escribió una sincera carta donde mostró su disconformidad con su rendimiento e, incluso, pidió perdón por no corresponder como es debido al cariño brindado por la parroquia blanquiazul.
Ahora Alejo es otro jugador, renovado y sin la `mochila de la responsabilidad´ cargada hasta arriba. El de Valladolid ha disputado ocho de los diez partidos disputados hasta el momento defendiendo la camiseta cadista. Es cierto que en la mayoría de las veces parte como suplente, siendo el primer revulsivo para Cervera. En ese rol de agitador, el extremo se encuentra cómodo, y está rindiendo al nivel de sus exigencias. Este fin de semana se enfrentará al Málaga, equipo y afición que se adentró en un rinconcito de su corazón, por lo que será más que especial el volver a pisar el césped de La Rosaleda.
