
LAS DOS CARAS DEL MÁLAGA
Compartir esta publicación
@JuanjeFernandez || El Málaga de la campaña 2019-2020 está demostrando tener dos caras. El equipo de Víctor Sánchez del Amo lo volvió a demostrar en el partido de ayer ante el Rayo Vallecano. Un primer tiempo excelso, donde el equipo rozó la perfección en algunas transiciones, así llegó el uno a cero de Cifu a los siete minutos, y una segunda parte muy pobre donde los malaguistas incluso pudieron acabar perdiendo el partido tras el gol tempranero de Embarba. Problemas que se agigantan con los números del equipo como local, donde no gana desde la temporada pasada.
No es la primera vez que ocurre esto. En Miranda del Ebro el pasado sábado, el Málaga volvió a ser una lenteja. Primera parte de control absoluto y ocasiones y unos veinticinco minutos finales que casi llevan al equipo al desastre. Víctor lo reconocía ayer en sala de prensa. “Afecta emocionalmente lo que sucede en el campo, mis jugadores lo dieron todo. Esas situaciones donde entras con dudas afecta a las tomas de decisiones, que te lleva a tener más o menos capacidad de reacción. Para nosotros no hay ningún aspecto negativo, no estamos a plenitud física, no hemos podido trabajar en verano como lo han hecho equipos más estables, y eso se nota”, dijo el preparador ante los medios.
Lo curioso es que el mal juego no siempre coincide con la segunda parte. Ante Las Palmas o Girona, semanas atrás, el Málaga jugó mejor en los segundos cuarenta y cinco minutos. Ante los canarios se consiguió el empate en los últimos diez minutos mientras que en el derrota en Montilivi fue el Málaga el que acabó acorralando al Girona en los minutos finales del choque. Un problema que afecta a un equipo que según su cuerpo técnico se encuentra en plena pretemporada.
