Se acabó el maleficio por fin (3-2)

El Málaga, con sufrimiento en el descuento, se impone al Lugo (3-2) y gana en La Rosaleda casi once meses después gracias a los tantos de Cristian, Rubén Castro y Dani Lorenzo.

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Rubén Castro celebraba el 2-0 / LaLiga

El Málaga vuelve a ganar en La Rosaleda casi once meses después. Un periplo de sufrimientos, tardes negras y un sinfín de decepciones. Qué losa se han quitado los blanquiazules en este 16 de octubre. Con una actuación que quedó empañada con los goles en contra al final. Salió todo de cara hasta el 90; momentos de sufrimiento porque los hubo y ser efectivos, hoy sí, en el área visitante. Aviso de Pepe Mel a los veteranos el miércoles, y cosas del fútbol. Cristian y Dani Lorenzo, dos perlas de La Academia, iban a ser los arquitectos del triunfo ante el Lugo (3-2).

Debutaba el extremo por la banda izquierda y qué puesta en escena del canterano en Martiricos. Error garrafal de Whalley en la salida de pelota, le cayó la pelota en el pico del área y zurdazo seco colocado al palo; imposible para el causante del gol. Éxtasis en la grada… y un pequeño bálsamo. Golazo nada más arrancar el partido y algo de tranquilidad en las piernas. El Málaga se soltaba, y el público amedrentado por toda la previa, también; una entrada por cierto maquillada (14.623 espectadores): algunos centenares llegarían tarde a su butaca.

Cogían inercia los de Pepe Mel en ataque. A punto estuvo Hervías de poner el segundo con una de sus especialidades: el lanzamiento de falta directa, provocada por Luis Muñoz, acompañada de amarilla para Carbó. Cañonazo seco del ’14’ desde unos treinta metros que reventó el travesaño. Los blanquiazules tenían otra cara. Diáfanos en ataque y momentos de alegría. Enfrente un Lugo que apenas inquietaba a Manolo Reina, hasta que Manu Barreiro enganchaba una gran pelota desde la izquierda que se marchó arriba; el único acercamiento de los lucenses en el ecuador de la primera mitad.

El objetivo no era otro que mantener el nivel físico, el talón de Aquiles en las últimas semanas, más allá de los resultados. El Lugo se volvía a estirar con una contra de manual, que a punto estuvo Chris Ramos de culminar; el mismo que fingía una supuesta agresión de Manolo Reina. Ocón Arráiz milagrosamente no llamó al colegiado. Temporizar hasta el descanso y amarrar sí o sí ese valiosísimo 1-0. Botín que se llevaban los blanquiazules al vestuario.

Xavi Torres, exblanquiazul, daba el primer aviso en la segunda mitad en una jugada de estrategia; contestado por Esteban Burgos tras un centro de Hervías. Pasito atrás de los blanquiazules y nueva ocasión para los de Hernán Pérez, la más clara: cabezazo de Alberto que repelía Reina cuando Manu Barreiro se relamía para empujar. Momento de partido crucial para romper el maleficio en La Rosaleda.

Pero iba a ser el Málaga el que iba a asestar casi un golpe definitivo al partido, obra de Rubén Castro, que no iba a desaprovechar un balón muerto en el área para batir a Whalley. Sin embargo, había que terminar de hacer los deberes a media hora del final, ya que también hay que pelear con ese miedo a ganar. No se podía escapar bajo ninguna circunstancia este triunfo, madurado y donde los de Pepe Mel habían mostrado oficio en la primera hora de partido.

Manolo Reina evitaba el 2-1, centro de Clavería que se envenenaba, y La Rosaleda se ponía en pie para despedir a Cristian; el nuevo ídolo de la afición blanquiazul. Casi media hora para otro de los mimados de Martiricos: Dani Lorenzo… autor del tercero. Qué contragolpe perfecto en los de Pepe Mel, empezado por Rubén Castro y finalizado por el marbellí.

Y una Rosaleda que dejaba una imagen insólita desde el pasado 20 de noviembre de 2021. Ha llovido desde entonces. Minutos para disfrutar hasta el final, pero sobre todo tratar de recuperar la relación con la grada. Espectacular la afición malaguista una vez más. Ni ser colistas ni la crisis que vive la institución; un ambiente de fiesta cuando quizás no debería serlo. Sebas Moyano recortaba distancias al final, y gracias a Dios que fue en el descuento. Los de Hernán Pérez se quedaron sin tiempo, por los pelos; porque Manu Barreiro iba a firmar el 3-2 final con apenas un minuto por jugar. Con cánticos finales contra Manolo Gaspar, y pancarta incluida.

3 COMENTARIOS

  1. Esperemos que los 2 goles en el descuento sirvan para que la próxima vez no se relajen. Aupa Málaga, el próximo rival, Oviedo, debe servir para seguir con éste planteamiento de usar más las bandas.

  2. Yo hubiera hecho los mismos cambios que mel, salvo el sacar a villalba, no esta en forma, y el sustituir a hervias y no poner a un extremo rapido nos condenó porque el otro equipo subió sin miedo a contra rapida.

    Caro jugo fatal de pivote, no fue su culpa pero una vez q empezaron a acumular jugadores altos nos vacunaron.

  3. Por fin!. Disfrutamos en el estadio como si hubiéramos ganado la Champions. De locura.
    Ojo! Ahora más tranquilo digo que en frente teníamos al Lugo y cuidado con las confianzas que si dura el partido 5 minutos más….la liamos y gorda.

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