CRÓNICA | Noche mágica de goleada, VAR y villancicos para despedir el 2024 en La Rosaleda

Partido de los que huelen a final en La Rosaleda. Las navidades acechan y el conjunto malaguista afrontaba hoy un partido que podría suponer una bomba de oxígeno de cara a las vacaciones. Seis partidos consecutivos sin ganar habían generado la necesidad de los boquerones de volver a sumar de tres en su feudo y más aún ante un rival directo como es el CD Eldense. Finalmente, todo quedó en una noche mágica de goleada, VAR y villancicos para despedir el 2024 en La Rosaleda (3-0).

El inicio fue mucho más enérgico por parte de los alicantinos. Los de Dani Ponz evitaron ese posible empuje casero de los blanquiazules en los compases iniciales. Sin embargo, tan solo ocho minutos le duró al Eldense esto. Ante la falta de gol, la primera que tuvo el Málaga fue para dentro. Antoñito Cordero rompía su sequía goleadora con un derechazo cruzado y raso. A menos de medio mes para tener la libertad de firmar con cualquier otro club, el jerezano, mirando a la grada, y con los dedos índices señalando el verde, indicaba: «Yo aquí».

Después de esto, el partido se rompió por completo. El Eldense amenazó en varias ocasiones topándose con el muro blanquiazul, pero ante una línea tan defensiva tan adelantada, los de Pellicer comenzaron a hacer mucho daño al espacio. Seis minutos más tarde, en un córner, Galilea encontraba el balón dentro del área y la mandaba a guardar para estallido de La Rosaleda. Sin embargo, en el centro, la rosca que imprimió Dani Sánchez al balón terminó saliendo por línea de fondo. Por tanto, el gol no subió al marcador.

La versión más dañina y llegadora del Málaga CF

Al minuto 21, el ritmo era frenético y el cuadro boquerón se estaba gustando. Ante esto, y con Ian Mackay atendido por problemas físicos, Ponz aprovechó para, a modo de tiempo muerto, reunir a los suyos en dicha breve pausa cerquita de su banquillo al más puro estilo fútbol sala. De poco iba a servir, porque a balón parado, en el minuto 27, Dani Sánchez iba a mandar otro caramelito al área que encontraba a Nelson en el segundo palo. Frentazo y 2-0, apuntándose el tanto ‘El Pai’ en su versión más goleadora a lo largo de su trayectoria.

La primera parte fue un auténtico disfrute para el espectador blanquiazul. Las ocasiones llegaban de todos los colores y el resultado al descanso pudo ser mucho más abultado. Gabilondo, con un zurdazo en una incorporación al ataque, se quedó muy cerca del gol. También Baturina con un mano a mano en el que achicó muy bien el meta rival y un disparo de primeras cerca del punto de penalti que se marchó desviado. Hasta 12 tiros se contabilizaron a favor de los de Martiricos.

Justo al término de la primera mitad, al Eldense no paraban de llegarle noticias negativas. En el 43′, Iván Martos, anteriormente amonestado, cortaba un contragolpe de Lobete que suponía su expulsión por doble cartulina amarilla. Pero la cosa no iba a quedar ahí, Cordero seguía siendo un puñal por la izquierda. En lo que era prácticamente un mano a mano para hacer el tercero, Fran Gámez le terminó derribando. En primera instancia, el colegiado mostró la tarjeta amarilla, pero acudió a la pantalla para revisar una posible expulsión. No obstante, la jugada estaba invalidada por fuera de juego. Con esto terminaba una primera parte de locura con una maravillosa actuación del Málaga CF y 2-0 arriba en el marcador.

Baturina, sin gol, pero ovacionado por primera vez en La Rosaleda

Al comienzo de la segunda parte el Málaga no se iba a conformar. El protagonista en el inicio fue Baturina que contó con dos oportunidades de gol muy claras, sin suerte. La primera, un remate de cabeza casi en el área pequeña y sin oposición, que se marchó desviado. Aquí el respetable ya empezó a levantarle el ánimo con aplausos. En la siguiente jugada, el de Split se sacó un latigazo desde muy lejos que acabó estrellándose en la cruceta. Baturina terminó retirándose e¡del campo en el 64′ con gritos de: «¡Roko,Roko!.

Quien encontró el premio del gol en los minutos anteriores fue el otro sustituido en la misma ventana, Julen Lobete, con un testarazo en otro centro desde la esquina de Dani Sánchez. Diana que fue invalidada por fuera de juego posicional de Einar Galilea, que no tocó la bola, pero hizo falta sobre su marca en el instante previo al remate. El Málaga estaba insaciable y encontró el quinto gol, también anulado. Otro pase exquisito de Dani Sánchez iba a encontrar rematador en el segundo palo. Dioni no tocó la bola, pero participó en la jugada estando en posición antirreglamentaria.

Pasaban los minutos y La Rosaleda se convertía en una fiesta. La afición malaguista se iba a convertir en el actor principal durante el resto de la segunda mitad. Ovacionó a Cordero y Larrubia, pitó la entrada al campo de Alan Godoy. Reclamándole los balones al unísono y se animó con distintos tradicionales villancicos navideños. Para terminar haciendo la ola. Pero el festín de goles no había terminado. Kevin Medina se apuntaba un auténtico golazo con una falta directa desde la frontal para cerrar una noche mágica e inolvidable en La Rosaleda.