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Partido fundamental para los dos equipos que se daban cita en La Romareda. Zaragoza y Málaga necesitan urgentemente los tres puntos. Desde las 21:00 horas rodaba el balón en Aragón. Cosecharía un empate el Málaga en un partido sufrido. Un punto de sangre, sudor y rabia en La Romareda tras un gol zaragocista en los últimos minutos y después de jugar casi todo el partido con uno menos, una crónica de un partido de orgullo de los malacitanos.
Los primeros minutos eran muy movidos para los dos. Ninguno quería renunciar a la pelota ni al área rival y demostraba ser protagonista, sin embargo, pasó lo de siempre. Un error grosero de Javi Jiménez iba a hacer que el Málaga jugase con uno menos desde el minuto 15 tras ver la roja.
En los 15 minutos siguientes iba a haber dos ocasiones clarísimas, una para cada lado. Ratón y Yáñez salvaban los muebles de los suyos. En la recta final pedían la hora los de la Costa del Sol. Yáñez iba a salvar en dos ocasiones más a los malacitanos.
Acabó la primera parte con sufrimiento y un dominio lógico y evidente de los locales debido a la superioridad númerica. Lo bueno sin duda fue el empate, no hubo goles y Yáñez salvó al Málaga hasta en tres ocasiones. Se fueron al túnel de vestuarios con el empate a nada (0-0).
A la vuelta de los vestuarios el Málaga iba a mejorar su juego y sin perder las virtudes de la primera mitad; Yáñez de salvador. Realizaba un triple cambio Mel para buscar el gol e iba a haber reacción inmediata.
Haitam, en su primera intervención, iba a mandar el balón al fondo de las mallas en la primera de la segunda mitad. Los blanquiazules celebraban con rabia un gol vital y se iban a poner manos a la obra en defensa.
Era un asedio del Zaragoza y llegó el gol de los locales. En una jugada llena de rebotes Simeone la tocaría lo justo para poner el empate. El descuento, únicamente de tres minutos, se iba a hacer eterno.
Lo intentó el Zaragoza de una y mil formas y finalmente el Málaga conseguiría un punto muy sufrido y merecido por el esfuerzo. Hasta el último segundo iba a sufrir el equipo de Pepe Mel. Lo iba a conseguir el Málaga, el colegiado pitaría el final y los costasoleños se traerían un punto en la maleta de sangre, sudor y rabia en La Romareda (1-1).