El 1×1 del Málaga ante el Tenerife

Bustinza fue la gran novedad del once blanquiazul en una alineación que contó con pocas sorpresas. El vasco volvió al verde en detrimento de Juande Rivas. Estas son las notas del Málaga ante el Tenerife. Una dura derrota en la isla.

Titulares:

MANOLO REINA (3): Poca seguridad en el día de hoy. Antes de la expulsión sembró dudas en centros laterales.

JUANFRAN (3): Poco acierto ofensivo y frágil atrás. Fue objeto de falta de Enric Gallego y le cobraron un penalti inexistente.

BUSTINZA (2): De más a menos. Volvió al once. Pese a la expulsión mostró buen rendimiento defensivo. Doble amarilla clara. Inocente. Sobrepasado por Waldo en una ocasión.

ESCASSI (4): Le tocó jugar de central zurdo y después modificó su posición. Lejos de su mejor versión. Aun así se mostró expeditivo.

JAVI JIMÉNEZ (3): Poco rendimiento. Discreto. Sufrió con Mellot.

N’DIAYE (4): De más a menos. Se introdujo en la zona central. Volvió a ver amarilla. Sin brillo en el día de hoy.

FEBAS (4): Lo intentó como siempre, pero se diluyó con el paso de los minutos. Muy solo y lejos de encontrar socio ofensivo.

GALLAR (4): Autor del gol y poco más. Más participativo, pero desapareció en la segunda mitad.

FRAN VILLALBA (3): Intentó una chilena que podía haber sido el gol del año. Poco más. Sin presencia en la segunda mitad.

FRAN SOL (2): Mal partido del atacante. No entró en juego.

RUBÉN CASTRO (3): Desaparecido. Solo tuvo un buen remate. No lo encuentra el equipo. Su rostro lo explica todo.

Suplentes:

LOREN (5): Con ganas e ímpetu. Buenos minutos aunque muy solo. Buen remate.

CHAVARRÍA (2): A años luz de ser un jugador importante. Lejos de su mejor versión.

GENARO (2): Resta más que suma. El penalti inexistente nace por un mal despeje suyo. Error de bulto.

JUANDE (4): Poca incidencia en el juego.

DANI LORENZO (5): Le tocó salir en un momento complicado. Personalidad para el chaval. Poco más que decir.

El míster (3): Poco más que decir de un patrón que no genera resultados. Ni el plan A ni el plan B. Rubén Castro anda desquiciado, el Málaga no tiene seguridad ni equilibrio. La expulsión y el penalti matan cualquier atisbo de reacción.