El Málaga, obligado a buscar un ‘9’

Tras la inminente salida de Loren Zúñiga, el club deberá reforzar esta posición. El Málaga, obligado a buscar un ‘9’.

El conjunto de Martiricos con Loren Juarros a la cabeza ha realizado seis incorporaciones. Objetivo, público o no, de pelear el ascenso. De los seis fichajes, tan solo uno es delantero, Dioni Villalba. Desde la Ciudad Condal aterriza el cedido Roberto tras su mili en Can Barça. Y hasta aquí llega la pólvora del actual Málaga CF. Loren Zúñiga tiene pie y medio en el Famaliçao portugués al no estar conforme con el rol de tercer delantero que le ofrece Pellicer. Reforzar la delantera es una misión indispensable ahora mismo.

Si ya con Loren Zúñiga se veía necesaria la llegada de otro artillero, con la venta del canario se esperan una o dos llegadas en ataque. Las variantes del técnico de Nules pasan por alinear uno o dos delanteros habitualmente, ya sea un 4-4-2, 4-2-3-1 o 4-3-3. Lo que es seguro es que con dos efectivos solo, no llega.

Dioni, que ha comezado la pretemporada entre algodones llegando incluso a perderse las primeras sesiones de entrenamiento, tiene gol. A priori es un jugador con una buena capacidad goleadora pero siempre se mantiene viva la llama de la incógnita. La presión de vestir la camiseta del Málaga y todo lo que ello implica no es fácil. Es el equipo de su tierra, la camiseta que siempre quiso vestir, la necesidad de ascender, la masa social del club que no va a perdonar nada este año… La veteranía y mentalidad del futbolista debe ser clave en su adaptación.

Roberto viene de curtirse en la categoría. Al igual que Larrubia y Dani Lorenzo, el jugador ha sido un habitual en su equipo y ha jugado 34 partidos en Primera RFEF, logrando anotar seis tantos. La entrega, lucha y esfuerzo de Roberto son indudables, pero, al menos de momento, no es un delantero que firme más de 10 goles por temporada. Bien es cierto que Pellicer confía en él como jugador importante de la plantilla y a sus 21 años la proyección es buena.

Loren Juarros deberá firmar dinamita para la zona del gol. En un plano idílico, la idea de traer un extremo con gol y un ariete clásico rematador sería perfecta.

Dioni conversa con Pellicer en un entrenamiento en la Federación | Javier Díaz